Dijo que renunciará a su jubilación de privilegio. Cargó contra Máximo Kirchner por impulsar un proyecto sin sustento fiscal que ya tuvo media sanción de Diputados. Volvió a cuestionar a los bloques que apoyaron la iniciativa e insistió en la necesidad de contar con la ley Bases y el paquete fiscal. Las duras críticas complican el objetivo de obtener los votos para esos textos
El presidente Javier Milei anunció anoche que presentará ante la Anses su decisión de no ejercer el derecho a la jubilación de privilegio y ratificó que vetará cualquier ley que atente contra el equilibrio fiscal de Argentina.
En ese sentido, apuntó contra Máximo Kirchner por la media sanción que obtuvo el martes en Diputados una nueva fórmula de movilidad previsional.
La determinación fue informada en un comunicado difundido en la tarde de ayer en las redes sociales oficiales de la presidencia: “Con el propósito de rectificar lo acontecido en la Cámara de Diputados de la Nación, y en consonancia con la determinación del Poder Ejecutivo de desmantelar el entramado normativo de privilegios políticos, el Presidente Javier Milei presentará ante la Anses su decisión de no ejercer el derecho a la jubilación de privilegio”.
“Este Gobierno tiene el mandato de rescatar al país de la miseria a la que ha sido relegado como consecuencia de la irresponsabilidad fiscal de aquellos que, paradójicamente, proclaman defender a los jubilados mientras sostienen jubilaciones de privilegio multimillonarias”, señala el texto.
“El Presidente de la Nación ha demostrado de sobremanera la voluntad de cooperar con la dirigencia política recurriendo al Congreso de la Nación en búsqueda de las herramientas necesarias para salir de la crisis, y proponiendo el Pacto de Mayo para acordar Políticas de Estado con todos los actores de la vida económica y social de la Argentina”, prosigue.
“Al día de hoy esa buena voluntad no ha sido recíproca por parte de la mayoría de la dirigencia. Han dilatado el tratamiento de la Ley Bases, han agredido sistemáticamente al gobierno nacional, y todas las semanas proponen una nueva agenda legislativa dedicada a entorpecer el programa económico de este gobierno”, agregó el comunicado.
Además, denunció: “Algunos actores quieren que la Argentina siga por el mismo rumbo que nos ha condenado al fracaso. Eso no va a pasar con este Presidente. La Argentina ha cambiado y el mandato popular será defendido con todas las herramientas del Poder Ejecutivo”, concluyó el texto.
Vale recordar que Milei y Miguel Ángel Pichetto sostuvieron un contrapunto en las últimas horas por la jubilación de privilegio que cobran los presidentes en Argentina. Mientras que el actual jefe de Estado impulsa la idea de eliminar ese beneficio, el diputado nacional defendió esa tradición. Ambos utilizaron expresiones fuertes para argumentar sus posiciones. “Una cabeza estúpida piensa eso”, dijo el legislador.
“Se les acabó, que se caguen de hambre”, retrucó el jefe de Estado.
La disputa
Pichetto había pedido que las jubilaciones de los jefes de Estado se respeten. “No rompamos este principio que reconoce en la figura de un presidente de la nación un derecho que le debe determinar que luego de que termina su mandato puede hacer un aporte desde las ideas, desde el aporte cultural, intelectual al país”, insistió el legislador.
La respuesta de Milei fue parte de su discurso en un encuentro que se llevó adelante en Parque Norte (ciudad de Buenos Aires). Allí participaron empresarios, profesionales y dirigentes políticos.
El Presidente fue el orador principal, y acudió acompañado de integrantes de su gabinete, como la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y su par de Defensa, Luis Petri.
En ese marco, el jefe de Estado se explayó con su habitual estilo, brindando una exposición técnica acerca de los lineamientos económicos que su gobierno aplicó en seis meses de gestión.
Sin embargo, tuvo referencias específicas de malestar hacia la media sanción que lograron los bloques opositores en la Cámara de Diputados, sancionando una nueva fórmula jubilatoria que actualiza los haberes del sector pasivo teniendo en cuenta una recuperación del poder adquisitivo perdido en estos meses de alta inflación.
De la misma forma que lo expresó en sus redes sociales, Milei insistió en que vetará la norma si finalmente se convierte en ley en el Congreso. “Bukele gobernó a puro veto, lo que hacían los degenerados fiscales las vetaba, que es lo que voy a hacer yo”, insistió Milei.
Objetivos
Por lo demás, Milei enfatizó la decisión de su gobierno de continuar con el saneamiento de las cuentas públicas y avanzar en reformas para liberar de regulaciones a la economía, en contra de las aspiraciones de mayores gastos de legisladores a los que calificó como “degenerados fiscales”.
El discurso del Presidente buscó llevar tranquilidad en momentos en que los mercados se muestran muy volátiles producto del ruido político que se coló en los últimos días, no sólo por la demora en la votación de la ley Bases y el paquete fiscal sino también por la reciente media sanción en Diputados de una reforma jubilatoria, además del affaire por el tema alimentos que obligó al Gobierno a avanzar en numerosos cambios en el Ministerio de Capital Humano.
“Les voy a vetar todo, me importa tres carajos”, dijo ante los asistentes al Latam Economic Forum que tuvo lugar ayer en el Complejo Parque Norte.
En las conversaciones que el Presidente mantiene regularmente con Luis Caputo, el ministro de Economía ya le había advertido sobre “el riesgo de un aumento en las demandas por aumentar el gasto en momentos en que tiende a ceder el temor por la inflación y la economía comienza a recuperarse”, según señalan en la Casa Rosada.
Milei redobló la apuesta y no sólo dijo que vetará toda ley que atente contra el equilibrio fiscal sino también que seguirá reduciendo el gasto, señalando que, por ejemplo, en materia de contratados en el sector público ya se produjeron 25.000 bajas y que va “a terminar echando 75.000 personas”.
Con todo, el Presidente se encargó de mostrar diferentes datos positivos que muestra la macroeconomía y reiteró que más allá de la Ley Bases, el paquete fiscal y el DNU, tiene aún unas 3 mil reformas pendientes.
Para Caputo, “lo peor ya pasó”
El ministro de Economía, Luis Caputo, se manifestó optimista sobre el futuro cercano y estimó que “lo peor ya pasó”.
El funcionario habló ayer en la apertura del 10° Latam Economic Forum. En su presentación afirmó: “Lo peor ya pasó. Estamos en franca recuperación. La velocidad dependerá de dos cosas: la ley Bases y de que nosotros podamos convencer a la gente”.
Caputo subrayó que la recuperación económica será más rápida si se logra aprobar la ley Bases, una normativa clave para la estabilidad económica del país. Además, enfatizó la importancia de ganarse la confianza de la ciudadanía para impulsar las medidas necesarias.
El ministro también realizó fuertes declaraciones sobre la política y su impacto en la economía. “La política, para muchos, es un negocio. Cuando entiendan eso, van a entender lo que está pasando en el Congreso”, expresó. Estas palabras reflejan su crítica a la falta de apoyo en el ámbito legislativo para las reformas propuestas por el gobierno.
En un tono más coloquial, Caputo señaló que el apoyo de la gente es fundamental para el gobierno, comparándolo con un plato tradicional argentino. “El apoyo de la gente no es caviar, porque a mí no me gusta, pero sí es milanesa con papas fritas. Y el apoyo es de todas las clases sociales”, afirmó, subrayando el respaldo popular de diversas franjas de la población.
Finalmente, Caputo abordó la creciente oposición que enfrenta el Gobierno, atribuyéndola a la percepción de estabilidad que ha logrado. “¿Por qué creció la agresión contra el Gobierno últimamente? Porque antes comían pochoclos y pensaban que nos íbamos en abril, y ahora la empiezan a ver y están preocupados que nos quedemos ocho años”, concluyó.
Por lo demás, el funcionario consideró: “Recibimos un paciente en coma 4, más cerca de pasar del otro lado que el de salir sano; más cerca de Venezuela que de ser un país normal y la realidad es que hoy estamos en franca recuperación”, dijo.