El presidente Javier Milei firmó un decreto declarando la “emergencia del sector energético nacional hasta fines de 2024” para los segmentos de generación, transporte y distribución de electricidad, como también para el transporte y distribución de gas natural. En el decreto, el Gobierno extiende las intervenciones de los entes reguladores del sector (ENRE y Enargas), debido a la demora en los nombramientos, y ordena el inicio de la revisión del esquema tarifario para que entre en vigencia en 2024.
En el decreto 55/2023 se sostiene que “a partir de 2003 en general, y desde 2013 en particular, no han dado señales económicas suficientes para incentivar las inversiones necesarias acordes al crecimiento de la demanda de dicho servicio”, por lo que vuelca la responsabilidad de la actual sistema de emergencia en las bajas tarifas que cobran las empresas prestadoras, que están privatizadas desde la década del noventa.
Según la información volcada en el decreto, las dos principales prestadoras de energía eléctrica Edesur y Edenor –a cargo de la distribución en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano– presentan cifras críticas en la eficiencia del servicio.
Así, el decreto ordena el inicio de una revisión tarifaria integral de estas prestadoras, cuyas tarifas resultantes deben entrar en vigencia antes del 31 de diciembre de 2024. Asimismo, habilita a implementar adecuaciones transitorias y ajustes periódicos en los cuadros vigentes, para garantizar la normal prestación de los servicios mientras se realiza dicha revisión.