ESCUCHAREl economista Carlos Melconian estimó que la inflación minorista desacelerará en los próximos meses, aun pese a la expansión del gasto público previo a las elecciones al tiempo que se manifestó por un pronto acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que permita al país evitar el “acantilado” y al menos volver al “camino de ripio, no a la autopista”.
Melconian fue orador invitado en el marco del encuentro virtual organizado por Fundación Mediterránea por sus 44 años como entidad.
Con un discurso descontracturado, propio de su perfil, y ante un auditorio de unas 350 personas, el economista recorrió todos los ejes, desde los económicos hasta los políticos y hasta arriesgó qué podría ocurrir en los próximos comicios legislativos.
Respecto a la inflación, dijo que en cierta medida le resulta funcional al Gobierno para licuar el gasto público y el stock de Leliq, más allá de impactar en el poder adquisitivo de los salarios.
Para Melconian, el Gobierno tiene un plan económico que lo definió en unos pocos ejes: controles de precios en diferentes frentes, freno a las tarifas y un dólar controlado como ancla inflacionaria.
El profesional alertó, sin embargo, sobre la suba del gasto público que se incrementó 15 puntos porcentuales desde 2007 al tiempo que la inyección de dólares, fogoneada por el precio récord de los granos, ya se agotó.
Melconian consideró que Argentina arrastra una década de retroceso estructural.
Con relación a las elecciones, estimó que se producirán con un “agotamiento del formato de la organización económica del país”, con una “variación anual del PBI positiva, el más bajo desde 2015, inflación tres por ciento mensual y 50 por ciento (anual), desempleo del 10 y pobreza del 45 por ciento”, aseguró.
“Con un escenario semejante cualquier Gobierno perdería las elecciones”, dijo y recordó cómo les fue a los oficialismos en diferentes países del mundo, todos atravesados por la pandemia.
Sin embargo, puso en dudas que esa experiencia electoral foránea, pueda replicarse en Argentina que siempre tiene su propia lógica.
Con respecto a la situación económica y los problemas estructurales y de precios relativos, acuñó una de sus típicas frases de impacto.
“Hay que llamar a Tu Sam, Orangel y Ludovica para que entre los tres les den rumbo a los precios relativos”, ironizó.
En cuanto a la negociación con el FMI, se pronunció por un pronto acuerdo en función de los abultados vencimientos por delante.
Finalmente, lanzó con otra metáfora: “Si te hiciste una lipo (por una lipoaspiración), no podes salir a comer ahí nomás milanesa y ravioles”, dijo en alusión a que, tras la renegociación con los bonistas y el ajuste en el gasto de la primera mitad del año, el Gobierno volvió a viejas prácticas que llevaron a que el riesgo país vuelva a ubicarse por encima de 1.500 puntos.
En la apertura del evento, la titular de la Mediterránea, María Pía Astori, se pronunció por “una justicia independiente y un plan educativo fuerte” para desarrollar “una Argentina competitiva”.
En ese contexto, reiteró planteos recurrentes como una baja en la presión fiscal y un programa económico sustentable.
