Al cierre de junio la brecha era de 19%, según un informe del Ieral de la Fundación Mediterránea. El sector advierte de que la situación es “insostenible”, si se mantiene la “desarticulación” de precios y la “pesada” carga impositiva
La brecha entre los costos y los ingresos del sector de la medicina administrada por privados en la provincia de Córdoba alcanzó 19% a fines del segundo trimestre del año, en comparación con igual lapso del anterior y llegará a 27,3% al cierre del tercer trimestre, según una investigación realizada por el Instituto de Estudios Económicos sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea.
Asimismo, se alerta sobre que la “brecha creciente en el tiempo”, ya que mientras comenzó siendo de siete por ciento en el segundo trimestre de 2018, para el mismo período de este año la diferencia se acerca a 30% en detrimento del índice de ingresos.
“Los prestadores de la salud en Córdoba están sumergidos en una prolongada crisis que responde a factores estructurales de larga duración, pero que se ha profundizado en último tiempo como consecuencia de la desarticulación de los precios relativos”, advirtió el informe. “Los ingresos que reciben por los servicios que prestan, han quedado desfasados en comparación con los aumentos ocurridos en el nivel general de precios”, agregó.
En ese sentido, se explicó que la evolución de los costos de la medicina privada “supera a la inflación en todo el período”. Simultáneamente, los ingresos del sector se ubicaron siempre por debajo del incremento general de precios. Es decir, el sector no sólo experimentó un aumento en sus costos por sobre la inflación sino que sus ingresos “ni siquiera llegaron a cubrir la suba en el nivel general de precios”. “Esta situación pone de manifiesto la crisis que atraviesan las instituciones del sector”, alertó el Ieral.
En tanto, al comparar los índices (costos e ingresos) con las proyecciones del anteúltimo trimestre del año, aseguran que “resulta alarmante la profundización de la brecha, considerando que los costos podrían superar a los ingresos en 27%”, comparando con la situación existente a inicios de 2018.
Es decir, a lo largo de un año y medio se proyecta el crecimiento de costos de la salud de 114% mientras que los ingresos se expandirían 68%, con una brecha de 46 puntos porcentuales.
Con todo ello, el Ieral indicó que “cabe resaltar que la rentabilidad negativa observada no es producto de incorrectas decisiones empresariales del sector, sino más bien de políticas económicas y tributarias que distorsionan las reglas de juego de la actividad”.
Según se detalló, los prestadores no pueden trasladar el incremento de costos a los financiadores. Sólo pueden hacerlo mediante negociación de aranceles médicos, pero el aumento de aranceles implica incrementos en los planes de salud, regulados por la Superintendencia de Servicios de la Salud. Es así que las clínicas y sanatorios quedan atrapados en múltiples negociaciones con el Ministerio de Trabajo y sindicatos por los salarios, con los financiadores por los aranceles y con autoridades por el precio de los planes de salud.
“En esta situación, los prestadores deben soportar mayores costos que no se corresponden con incrementos en aranceles”, aseguraron.
Finalmente, consideraron que “en un contexto de elevada inflación y volatilidad cambiaria, debe considerarse además que el pago recibido por los prestadores no es automático, sino diferido entre el momento que presta sus servicios y el momento en que cobra por ellos”.
Esta mora implica un costo financiero adicional en torno a 15% trimestral. En suma, el informe del Ieral alerta sobre que “la situación no es sostenible si se mantiene la desarticulación entre precios y a esto se añade una pesada carga impositiva”.
“Resulta necesario diseñar políticas públicas que actúen en pos de la sostenibilidad del sistema tanto a corto, como a largo plazo, y que brinde los incentivos necesarios para lograr mejoras de calidad de las prestaciones”, concluyeron.
Es un panorama desalentador porque las variables de la economía.. inflación.. producto bruto interno no están en ese camino. Hay que hacer una movida muy grande para tratar de cambiar estás variables..un país como el nuestro no sale si no cambiamos los paradigmas..