Se pronunció por el superávit fiscal y los cambios a la “ley ómnibus”. No obstante, se quejó de los recursos perdidos por las provincias, entre ellos el Fonid, los subsidios al transporte y los recursos para la Caja. Dijo que la Provincia seguirá asistiendo a los sectores productivos y a los más vulnerables y que mantendrá la obra pública. Pidió a UEPC interpretar el momento para cerrar la paritaria. Disertó en la Mediterránea
El gobernador Martín Llaryora justificó las políticas de shock tomadas por el presidente Javier Milei, aunque advirtió que al país le hace falta un “paquete productivo” para equilibrar las consecuencias del plan fiscal que aplica el jefe de Estado.
Con todo, reclamó por la restitución del Fonid, los subsidios al transporte del interior y los fondos para cubrir el déficit de la Caja de Jubilaciones.
En ese marco, defendió las medidas de ajuste tomadas por su gestión, entre ellas la reducción de ministerios y paritarias atadas a la recaudación, sin desatender el plan de obra pública que admitió se ralentizó por la realidad actual y a los sectores más vulnerables.
Llaryora habló ayer invitado por la Fundación Mediterránea, en un almuerzo que contó con la presencia de un auditorio colmado de empresarios y de parte de su gabinete.
Respecto a la coyuntura del país, la calificó de “difícil y de crisis”.
“Cuando en diciembre tuvimos un primer encuentro (con Milei) entendí que había que tomar medidas de shock. En eso avalo lo que hizo el presidente Milei. Ya no hay más 100 días (de aguante). Eso era en la etapa analógica pero no hoy. Y uno puede compartir algunas medidas o no, pero había que tomarlas”, se sinceró.
En esa línea, justificó las medidas tomadas por su propia gestión a poco de asumir, entre las que mencionó el aumento de aportes personales y subir contribuciones a la Caja de Jubilaciones, además de negociar salarios a la baja.
“Sabíamos que la búsqueda del equilibrio fiscal iba a caer con peso sobre las provincias”, argumentó.
En ese contexto, destacó la herencia en las cuentas públicas que dejó su antecesor Juan Schiaretti, pese a lo cual debió avanzar en un achique en el gasto.
“Tuve que achicar ministerios, supresión de contratos… No fue sólo achique sino que se redujeron los sueldos de funcionarios públicos”, detalló Llaryora.
Mencionó, además, dos “temas graves” que afrontó su administración: la caída de la coparticipación y los recursos propios; y los fondos de la Caja de Jubilaciones de la provincia que no llegan desde Nación.
Para equilibrar esa situación, el Gobernador subrayó que decidió que los empleados activos debieran soportar el costo de las jubilaciones provinciales, ya que luego serán ellos los beneficiarios del sistema. Además, explicó por qué volvió a aplicar el diferimiento.
“Gracias a eso, podemos seguir teniendo superávit fiscal”, dijo, ante la falta de envíos de fondos desde la Anses para cubrir el rojo previsional de Córdoba.
Acto seguido, Llaryora destacó como positivo que hoy la Provincia logra pagar salarios en virtud de la recaudación.
“La Provincia se sostiene, aun cayendo la coparticipación, básicamente por las medidas de ajuste en el gasto político y funcional”, subrayó.
“Se elevan los salarios sólo por los ingresos… Es un acuerdo colaborativo, que luego mejoraremos”, completó en un mensaje a los gremios y particularmente en referencia a la UEPC, que hasta ahora es el único sindicato que no firmó la paritaria y que de hecho resolvió un nuevo paro de 24 horas el jueves próximo.
“Estas medidas, de ajuste y básicas, son las que le permiten a Córdoba estar parada mejor que otras provincias”, defendió.
En cuanto al déficit fiscal, reconoció, “hay que cerrarlo”.
Con todo, se diferenció de la Nación al recordar: “En Córdoba estamos sosteniendo la obra pública en marcha. En Argentina, lo de Córdoba parece una quimera”, aseguró. “En puestos de trabajo, significa unos 10.000”, puntualizó Llaryora.
También subrayó su nueva política de Salud, en especial a las potestades que le dio a los directores. “Los cambios que hicimos nos prepararon para la nueva realidad. Había dicho que el incremento en la atención era de 25%… hoy es del 30%. La recesión hace que mucha gente no pueda pagar la prepaga y vuelva a la salud pública”, reveló.
Ahora sí, sobre los docentes, culpó a la Nación por la caída del Fonid pero se mostró confiado de un acuerdo con la UEPC.
Amortiguador
“Hemos decidido trabajar en la contención y ser un amortiguador para la sociedad en esta recesión que se va a profundizar”, anticipó y anunció que, por medio de Bancor, lanzó un plan para que los clientes residenciales, empresarios y comerciantes puedan financiar la factura eléctrica de febrero (ver aparte).
También hubo un párrafo sobre el recorte de los subsidios nacionales al transporte, y defendió los boletos sociales (el educativo y el obrero), que se ampliaron en los últimos días (por el incremento que sufrió tanto el urbano como el interurbano).
El Gobernador afirmó, en ese sentido, que Argentina “entra en un momento muy, pero muy difícil” y que por eso la Provincia estará en “cada punto social”. Sobre eso, anunció que también se ampliarán las ayudas del Paicor.
“Los convoco a que estemos más juntos que nunca. Les agradezco porque sé que, aun parada la producción, pero que sostienen el empleo. Se los quiero agradecer. Porque aquel que pierde el empleo empieza a sentirse un marginado. Y en los lugares donde cae el empleo, crece la pobreza y crece la inseguridad”, señaló desde el atril.
Situación social
“La mejor política social es generar trabajo”, reflexionó sobre el momento del país y amplió:. “Sin estigmatizar, la pobreza puede generar más inseguridad y, lamentablemente, puede crecer el narcotráfico”.
Llaryora dijo que la situación social se “está agravando” y que ante ese escenario “hay que tener valentía”.
El mandatario dijo que le hubiera gustado dar un discurso distinto, pero por la crisis tuvo que hablar en forma cruda. “No hay que ir hacia donde sopla el viento. Y hoy sopla el viento para dejar sola a la gente… Creo que el Estado no debe ni puede dejar sola a la gente. Hoy tenemos que estar al lado de los vecinos”, se defendió.
Como lo había dicho antes, también destacó la oposición que llevó adelante contra la “ley ómnibus” y el incremento, por ejemplo, de la suba de retenciones para la industria. “Y no fuimos nosotros solos. También hubo de la oposición”, destacó.
“Hoy, agradecer al Gobierno porque en el paquete de leyes esa medida no está más”, dijo. “Eso significa que hay que estar todos juntos”.
“Pacto de mayo”
“Que nos elijan a Córdoba para el pacto de mayo… qué mejor. Tenemos que sí o sí cambiar cosas. El Presidente no es culpable de la situación que heredó. Para nada. Y claramente había que hacer cambios. Después, la discusión de más o menos, como las retenciones… Es la defensa de los intereses de los cordobeses. No es personal”, aclaró.
Según Llaryora, cuando lee los 10 puntos del pacto de mayo, la mayoría en Córdoba ya se cumplieron. “Córdoba hace 20 años que tiene superávit fiscal”, ejemplificó.
Para el Gobernador, el pacto no debe ser político: hay que sumar a la producción y al trabajo: “Hay que sumar a otros sectores. Porque en la Moncloa o en Israel lo hizo la sociedad”,
“Vamos a acompañar la voluntad de cambio, pero defendiendo los intereses de los cordobeses”, afirmó Llaryora.
Rosario
En otro orden, y con la premisa “Rosario somos todos”, Llaryora volvió a manifestar su solidaridad con los habitantes de la vecina provincia de Santa Fe y de Rosario en particular, además de expresar su apoyo al gobernador Maximiliano Pullaro.
“Quiero solidarizarme con Santa Fe, sepan que tienen aquí un gobernador que los acompaña para que el Ejército colabore en la seguridad interna argentina”, declaró Llaryora en el marco del almuerzo organizado por la Fundación Mediterránea.
El mandatario ratificó así la postura expresada este domingo a través de la red social X. “Apoyo la decisión de la ministra @PatoBullrich de enviar Fuerzas de Seguridad Federales para no dar un paso atrás y combatir al narcotráfico”, manifestó en un posteo.
“Si ellos (por los narcotraficantes) ganan esta batalla, se van a fortalecer en una ciudad y van a ir por el resto. No hay que mezquinar, hay que ser solidarios, y hay que poner toda la fuerza de combate de la Argentina para que la gente de Rosario pueda salir a la calle”, agregó el Gobernador.