Según la evolución registrada mensualmente por la CAME, desde enero de 2018 se observan retracciones interanuales consecutivas. En septiembre, la baja fue de 14,5%, el segundo peor
número del año después de agosto y el tercero más bajo desde el principio del año pasado
La ventas minoristas pymes registraron hasta septiembre pasado 21 meses de retracciones interanuales y la mayoría de los comerciantes no espera grandes cambios en la tendencia, según detalló un nuevo informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
En detalle, en el noveno mes del año, la baja fue de 14,5% con relación al mismo período de 2018, registrando el segundo peor desempeño del año luego de agosto pasado y el tercero más bajo desde enero de 2018. Aun así, en la comparación intermensual el alza fue de 2,1%, lo cual mostró algo de estabilización del segmento y del consumo en general luego de pasado el primer impacto del shock devaluatorio post PASO.
No obstante el escenario sumamente negativo que se viene afrontando en los últimos dos años y el clima preelectoral hacia las presidenciales del 27 de este mes, los comerciantes se muestran algo optimistas sobre los resultados que tendrá la celebración del Día de la Madre, debido a los descuentos y las promociones que se están presentando.
Respecto específicamente de septiembre, CAME indicó que “el comercio minorista arrancó firme durante los primeros días del mes, pero el movimiento se fue conteniendo desde la segunda semana.
Las cuotas sin interés ayudaron a sostener la venta, y un tercio de los negocios no aumentó sus precios o lo hizo pero con incrementos menores que 5%”, y agregó que en los primeros nueve meses de este año, el descenso acumulado fue de 12,8% con relación al mismo lapso de 2018.
En términos de perspectivas, 38,7% de los comercios esperan que sus ventas aumenten durante los próximos meses (en agosto el porcentaje era sólo de 27,5%), 44,2% avizora que se mantendrán sin cambios y 17% estima que continuarán cayendo. Mientras tanto, el resto no puede “precisar la tendencia” en el marco de la actual incertidumbre, detalló CAME en el comunicado emitido ayer.
“A pesar del clima electoral que siempre incide negativamente en las ventas por la incertidumbre que genera, los comercios mantienen buenas expectativas para el Día de la Madre”, afirmó el texto en su párrafo final.
El relevamiento para evaluar la evolución interanual de las ventas minoristas del mes se realizó entre el lunes 30 de septiembre y el viernes pasado.
Se cubrió un universo de 1.100 comercios pymes de ciudad de Buenos Aires, Gran Buenos Aires, y el interior del país, en los principales rubros que concentran la venta minorista familiar y tanto con modalidad de venta física como online.
ECOLATINA
El “frente externo” es una “estrella solitaria”Mientras el consumo interno, la inversión y el gasto público retroceden en una economía “golpeada” por las crisis cambiarias de 2018 y 2019, el “frente externo” alumbra el próximo año como una “estrella solitaria”, según un nuevo informe de la consultora Ecolatina.
“Dado que la recesión sigue sin encontrar su piso, la mejora del saldo comercial se mantendrá en la segunda mitad del año, y el superávit comercial de bienes rondaría US$14.000 millones en 2019. Este resultado sería explicado por una importante caída de las importaciones (-22% interanual), que cerrarían 2019 en la zona de US$51.000 millones y un tibio avance de las ventas externas (+5% interanual), que acumularían US$65.000 millones este año, impulsadas en parte por la baja base de comparación que dejó la sequía de 2018 y los mayores saldos exportables que arroja una demanda interna deprimida”, explicó la consultora en un nuevo informe difundido a la prensa ayer.
“Más allá de las falencias locales, vale destacar que la mejora del resultado comercial sería aún mayor si la economía brasileña finalmente creciera –sus proyecciones de crecimiento pasaron de 2,5% a comienzos de año a menos de 1% en la última semana- y si nuestros términos de intercambio, es decir, los precios de nuestros productos de exportación respecto de los de importación no estuvieran cayendo (-17% interanual en el acumulado a agosto) producto de la cosecha récord que apuntaló la oferta internacional de productos oleaginosos y la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que retacea el crecimiento del gigante asiático”, agregó el documento.
En tanto, dado que ya se conoce que el desempeño económico del país no mejorará para 2020, la consultora indicó que se proyecta “un superávit comercial cercano a US$19.000 millones para el año que viene, un récord histórico medido en dólares corrientes. Un resultado positivo de esta magnitud será fundamental por dos motivos. Por un lado, por su impacto tradicional sobre los sectores transables. Por el otro, porque el sector privado aportará dólares frescos para los pagos de deuda que el sector público debe realizar”.
Aun así, el documento advirtió de que si estas proyecciones no se plasmaran en una realidad y no existieran otras fuentes de financiamiento -como ya se prevé que sucederá-, “los pagos de deuda del año próximo deberían reestructurarse”.
No obstante, todo indica que “al igual que este año, a la mejora del saldo comercial de 2020 se llegaría tanto por una caída de las importaciones (que estimamos no menor al 5% interanual), que rondarían US$48.000 millones, como por un avance de las exportaciones (en torno al 3,5% interanual), que acumularían US$67.000 millones”, precisaron los economistas de la entidad.
“En resumen, en 2020 el frente externo será otra vez una estrella solitaria dentro de una economía argentina golpeada en la mayoría de sus partes. Esperemos que también aporte los dólares necesarios para enfrentar los servicios de deuda relevante y se convierta en nuestro único héroe en este lío”, concluyó el informe.