Los contratos futuros de la soja y el maíz en Chicago cayeron ayer lunes a su nivel más bajo en cuatro años, por debajo de 10 y cuatro dólares el bushel, respectivamente, tras un informe sobre la oferta y la demanda en EEUU, con proyecciones de una producción récord. En tanto, los precios del trigo retrocedían uno por ciento tras cerrar al alza el viernes, aunque las pérdidas se vieron limitadas por las expectativas de una menor producción en Rusia y Francia.
El contrato de soja más activo en la Bolsa de Comercio de Chicago perdía dos por ciento a US$360,45 la tonelada en Chicago (US$9,81 por bushel), mientras que el maíz cedía un 0,3% a US$155,11 la tonelada (US$3,94 por bushel), ambos en sus niveles más débiles desde finales de 2020, cuando las medidas de restricción por la pandemia golpearon al comercio mundial y hundieron los precios de las materias primas.
En términos reales la soja descendió a su valor más bajo en 18 años, descontada la devaluación del dólar por efecto de la inflación en EEUU.
La soja es muy relevante para las exportaciones argentinas, más que por la venta del producto en grano, por la incidencia de sus derivados industriales, como harina (-1,9% a US$335,70 la tonelada), aceite (-1,8% a US$890,20 la tonelada) y residuos.
“Sin dudas estamos en un contexto bajista: EEUU va a una producción todavía mayor a la esperada, con recomposición de stocks. Pero los fondos especulativos estaban muy vendidos y están recomprando, y fuerte en maíz. Las subas se ven limitadas por ventas de EEUU y Brasil, donde todavía hay stocks y la devaluación de sus monedas apuntala ventas. En tanto, los precios en mínimos de cuatro años incentivan a compradores genuinos y ponen en duda el aumento de producción en Sudamérica”, precisó Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral.
Salvador Vitelli, jefe de Research de Romano Group, subrayó que “anota otra fuerte caída la soja, cotizando en Chicago a US$360 la tonelada. En términos reales, vuelve a valores de octubre de 2006″, afirmó, al considerar la inflación en los EEUU en los últimos años, que significó una depreciación relativa del dólar.
“Hay mucha tendencia bajista en los mercados de maíz y soja debido a las expectativas de una mayor producción estadounidense y a la oferta mundial en general”, dijo a Reuters un operador en Singapur.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) elevó ayer lunes sus estimaciones de producción de maíz y soja respecto a las del mes anterior, e informó de sus expectativas de una fuerte oferta mundial de ambos cultivos.