La situación de las industrias cordobesas se mantiene en niveles muy por debajo de los vigentes previo a la pandemia y que de hecho ya eran decididamente bajos, según surge de un nuevo informe elaborado por la Unión Industrial de Córdoba (UIC) en el marco del contexto de la pandemia.
La encuesta incluyó a 270 empresas, entre micro, pequeñas, medianas y grandes. Según un primer corte, 34 por ciento logró frenar la caída en junio mientras que 21 por ciento creció y 15 por ciento se mantuvo estable. En tanto, otro 34 por ciento aseguró que no para de caer, entre ellas el sector textil y el de la construcción.
El trabajo reveló asimismo que para el 17 por ciento se cortó la cadena de pagos, porcentaje que involucró al 29 por ciento de las microempresas.
En paralelo, para 21 por ciento de las compañías se extendió la cadena de pagos. Dentro de ese grupo, para el 70 por ciento la extensión fue de entre 60 y 90 días.
Para el 58 por ciento, por su parte, se mantiene sin cambios la cadena de pagos.
Asimismo, 33 por ciento de los encuestados dijo no haber tenido problemas para cobrar los cheques recibidos. El resto sí lo tuvo aunque en muchos casos en sólo un porcentaje menor de esos documentos.
En cuanto al nivel de actividad, para el 64 por ciento disminuyó con relación al año pasado, para el 20 por ciento se mantuvo y sólo el 16 por ciento dijo que mejoró.
Por lo demás, el informe de la UIC puso participar énfasis en el tema teletrabajo que por estas horas se discute en el Congreso nacional.
En rigor, en el ámbito industrial y principalmente en las micro y pequeñas empresas, no es un tema extendido.
De hecho, cuando se consultó sobre si podría tomarse como una mecánica de relación laboral para el año próximo, 40 por ciento respondió que no lo tenía entre sus planes, 23 por ciento que mantendrá la proporción actual, 15 por ciento que tiene personal teletrabajando pero sólo por esta coyuntura, 12 por ciento la disminuirán y sólo 10 por ciento que planean incrementarlo.
Por lo demás, muchas compañías tuvieron problemas para pagar salarios, impuestos y servicios, según surge del relevamiento.