Por su parte, la construcción se contrajo 75,6%, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
La actividad industrial retrocedió 33,5% durante abril, en el primes mes de restricciones plenas por las medidas de aislamiento para morigerar el coronavirus, mientras la construcción cayó 75,6%. según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Además, la actividad fabril de abril resultó 18,3% inferior respecto a marzo, en tanto que la construcción bajó 51,5% intermensual.
De esta forma, el sector industrial acumuló una merma de 13,5% en el primer cuatrimestre del año y la construcción un retroceso del 40,2%.
Vale señalar que, según las estimaciones oficiales del Ministerio de Desarrollo productivo, indicaron que durante mayo comenzó, lentamente a revertirse esta tendencia declinante, debido a la apertura de algunas actividades en distintas partes del país.
No obstante en abril, respecto a igual mes del 2019, la cuarentena golpeó duramente al sector, teniendo en cuenta que por ejemplo el rubro alimentos y bebidas, uno de los sectores considerados vitales para la producción, registró una merma de 1%, a pesar de que este rubro fue exceptuado al momento de poner en marcha la cuarentena, por lo que debió seguir trabajando para abastecer al mercado local y las exportaciones.
Otros sectores que mostraron fuertes bajas interanuales fueron productos de tabaco con -59,5%, textiles con una baja del 57,8%, prendas de vestir, cuero y calzado con 79,1%; y madera, papel, edición e impresión, que cayó 8,7%.
En tanto, sectores industriales como refinación del petróleo, coque y combustible nuclear exhibieron una contracción de 34,4%, ante la paralización casi total del transporte.
También el segmento sustancias y productos químicos, que bajó 11,1%; productos de caucho y plástico con -38,5%; y productos minerales no metálicos vinculados a la construcción, que retrocedió 70,7%.
Por su parte, las industrias metálicas básicas marcaron una caída de 65,2%; impulsadas por los subítemes productos de metal, con una disminución de 62,8%; y maquinaria y equipo, con una baja de 45,1%, entre otros.
Por último, el rubro vehículos automotores, carrocerías, remolques y autopartes registró en abril una estrepitosa disminución de 88,5% interanual.
En cuanto a las expectativas, 75% de los empresarios del sector proyectaron que la demanda interna continuará en baja al menos hasta julio próximo, contra 8,7% que anticipó una suba.
En este marco, 66,1% de los consultados proyectó que las exportaciones continuarán en baja los próximos meses.
En el caso de la Construcción, 81,9 de los empresarios consultados por el Indec que se dedican mayoritariamente a realizar obra pública, consideró que disminuirá el nivel de ejecución hasta julio, contra 9,9% que prevé algún tipo de mejora, mientras que el restante 28,2% no anticipó variantes.
En tanto, entre los que desarrollan mayoritariamente obra privada, 76,7% dijo que continuará en baja la actividad, contra 4,7% que anticipó una mejoría, mientras que 18,6% restante no prevé mayores cambios.
Hasta marzo, cuando el día 20 se declaró el aislamiento social, preventivo y obligatorio (ASPO), el sector de la construcción empleaba a 339.226 trabajadores, 23,4% menos que el mismo mes del 2019, informó el Indec.
IMPORTACIÓN
El Banco Central acuerda agenda de trabajo con la UIA
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) acordó ayer una agenda de trabajo con la Unión Industrial Argentina (UIA) para “superar los inconvenientes” para la importación de insumos para la producción surgidos de la comunicación A 7030 que dispuso nuevas condiciones de acceso al mercado único y libre de cambio.
En esa línea, el BCRA aseguró que establecerá un “procedimiento estandarizado” para habilitar los pedidos de autorización de acceso al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) a las empresas que deban importar insumos y estén alcanzados por la norma.
“Las autoridades de la central industrial expresaron la comprensión de normalizar el acceso al mercado y plantearon la necesidad de evitar demoras en el tratamiento de los pedidos de acceso a las divisas”, señaló el BCRA en un comunicado.
Asimismo, se indicó que “como parte de la conversación, el BCRA considerará los pedidos de las empresas que desarmen sus posiciones en operaciones de CCL o MEP o mantengan posiciones en divisas en el exterior como parte de su operación comercial habitual”.
Por su parte, la UIA calificó el encuentro como “una fructífera reunión de trabajo” y manifestó que sus equipos técnicos continuarán trabajando de manera conjunta con los del BCRA sobre los ejes que se trataron en la reunión, de modo de alcanzar soluciones.
Según trascendió, el objetivo del BCRA es avanzar en un mecanismo para “adaptar la norma” a los casos de, fundamentalmente, empresas que son fuertemente dependientes en su ciclo productivo de productos importados.
Este mecanismo, en principio, tendría un rol protagónico de los bancos, que serían los encargado de recibir los reclamos de las empresas que necesitan acceder al mercado para luego transmitírselos a la autoridad monetaria, que analizará cada caso en particular.
El objetivo es que el nuevo protocolo sea definido entre hoy y el lunes de modo de “terminar de pulir la mecánica y disipar las dudas” para que no se resienta en absoluto el mecanismo de acceso a las importaciones.
Otra entidad empresarial, la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), también manifestó ayer a la tarde su “preocupación” al cuestionar los criterios de aprobación de compra de divisas.
“No están definidos en la normativa, como tampoco los plazos máximos en los cuales el BCRA debería expedirse, lo que podría condicionar, en la práctica, el acceso directo a dicho mercado para quienes deban realizar pagos al exterior”, aseguró la CAC en un comunicado.
“Más de 80% las importaciones son esenciales para la industria (menos del 15% de las importaciones son bienes finales) por lo que el eventual entorpecimiento de la operatoria de comercio exterior por las dificultades del acceso al MULC dificultará la tan necesaria recuperación económica”, sentenció la entidad empresaria.
La circular A 7030, emitida el jueves pasado por el BCRA, establece que sólo podrán comprar dólares en el segmento mayorista aquellas empresas que tengan “activos externos líquidos disponibles”, entendidos como efectivo o depósitos a la vista en entidades financieras del exterior así como otras inversiones que les den disponibilidad inmediata de moneda extranjera.
Asimismo, la norma establece un período de 90 días previos y posteriores de inhabilitación para la compra venta de dólares a través del mercado bursátil -contado con liquidación y dólar MEP- para aquellas empresas que adquieran divisas en el mercado oficial.