Se trata de la mayor suba desde la creación del peso. Entre el cierre de 2015 y finales de 2019 trepó 406%. Después de la abrupta escalada de ayer, el blue casi llega a un incremento de 100 pesos en siete rondas
La gestión de Alberto Fernández sigue sin dar en la tecla de la receta para contener el dólar, que sigue subiendo en todas sus cotizaciones (que ya llega a la increíble cantidad de 48 tipos de cambio distintos, según recoge el economista Damián di Pace). El dólar contado con liquidación (CCL) registra la mayor suba desde la creación del peso, según un informe de la Fundación Libertad y Progreso.
Al cierre del mercado ayer martes, el tipo de cambio financiero (CCL) ya había trepado 14,6% desde comienzos de abril, por lo que acumulaba un aumento de 528% desde la llegada del actual Gobierno al poder, hace 40 meses. De ese modo, llegó -con ocho meses de anticipación- a superar por 122 puntos porcentuales la suba acumulada durante todo el gobierno de Mauricio Macri, que marcó 406%.
En tercer lugar le siguen la suba del CCL durante el segundo mandato de Cristina Fernández de Kirchner, con 228%, su primer mandato con 57% y, finalmente, el de Néstor Kirchner, con 7%.
“La suba del tipo de cambio durante la administración de Alberto Fernández se enmarca en un contexto de fuerte control sobre los movimientos de capitales y del comercio exterior (cepo), quitándoles la posibilidad a muchos agentes económicos de acceder al dólar oficial y resguardarse de la inflación”, afirmó la fundación.
En perspectiva, la última corrida cambiaria, que fue en julio del año pasado, generó un aumento del CCL de 14,1% mensual (punta a punta).
Previamente, con el resultado de las PASO en agosto de 2019, el mismo tipo de cambio subió 47,9% en un solo mes. A la luz del desempeño económico de la gestión del Frente de Todos aquella corrida toma otra dimensión, por la anticipación con la que actuaron los argentinos para tratar de cubrirse de lo que se avecinaba. Al día de hoy, abril acumula una suba de 14,6%.
Fuente: Fundación Libertad y Progreso
Eugenio Marí, Economista Jefe de la Fundación Libertad y Progreso, dijo que “la demanda de dinero está en su piso en 20 años” y el margen de maniobra del Gobierno se va achicando”. “Deberá dar señales rápidas para evitar que el proceso de corrida contra el peso se espiralice. Ya tenemos experiencia de corridas cambiarias que se detuvieron, como fue la de julio pasado”. En aquel momento la transición de Silvina Batakis sumó incertidumbre, que se disipó con la llegada de Sergio Massa, que no logró torcer el rumbo con su plan económico.
“Lo preocupante es que en lugar de aprender de esas experiencias y apostar por la mesura fiscal y la austeridad monetaria, la política económica sigue jugando al límite. Lo que estamos viviendo también debe ser una señal para el próximo gobierno, que deberá validar y guardar la credibilidad con la que asuma para no perderla rápidamente”, agregó Marí, que se inscribe en línea con la licuación de confianza que llevó adelante el ministro de Economía.
Por su parte, el economista Santiago Casas aseguró: “La suba del dólar de los últimos días refleja el rechazo absoluto que los argentinos tenemos por los pesos. La gente demanda una moneda con la esperanza de que mantenga su valor en el tiempo. Por las irresponsabilidades fiscales y monetarias de nuestros gobernantes, los argentinos vamos perdiendo la confianza en nuestra moneda, que pasa a valer cada vez menos. Habrá que ver si a partir del 10 de diciembre se presenta un nuevo gobierno que encare reformas estructurales y lance un plan de estabilización creíble, sólido desde el punto de vista técnico y considerado permanente para darle una solución al déficit fiscal y la deuda del BCRA, que son la razón de ser de la emisión monetaria”.
Por otro lado, el economista Lautaro Moschet sostuvo que esta corrida cambiaria “tomó velocidad” tras la publicación del dato de inflación de marzo. “El mismo estuvo muy por encima de lo que esperaba el mercado y reforzó la caída de demanda de pesos. Si este aumento del tipo de cambio se ratifica, veremos más presión sobre la inflación y entraremos en un círculo vicioso muy difícil de frenar”, dijo Moschet.
Dólar blue
La jornada de ayer marcó un nuevo récord nominal para el billete verde, que quedó al borde de los $500 en las casas de cambio de Buenos Aires, mientras que en nuestra ciudad llegó a comercializarse a ese valor. La corrida cambiaria se acentúa desde la semana pasada, marcando una suba de casi $100 desde el pasado lunes 17 de abril.
La corrida sigue marcando el ritmo de la vida de los argentinos, que ven las dificultades para desempeñar una vida económica normal y estable por este tipo de desequilibrios macroeconómicos a los que el Gobierno no encuentra la vuelta. Aunque algunos economistas esperan que el movimiento se calme en los próximos días (la brecha con el dólar oficial llegó al 129%, por encima de lo habitual) la inflación esperada para abril ronda el 7%, lo que seguirá poniéndole presión a los distintos tipos de cambio.