El Gobierno nacional está analizando reforzar el fideicomiso de trigo como mecanismo para morigerar las tensiones en el mercado local frente a la suba de los precios internacionales del grano y asegurar la materia prima para productos esenciales como la harina y los fideos a precios accesibles, afirmó el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
La medida se plantea en el contexto de la aceleración del precio internacional del trigo, cuyo contrato para mayo cerró ayer a US$475,46 la tonelada en el mercado de Chicago, y que acumula un alza de 38,42% desde el ataque de Rusia a Ucrania por el temor a un desabastecimiento pues ambos países representan casi 29% de las exportaciones mundiales del cereal.
“Armamos un fideicomiso para garantizar que los productos de Precios Cuidados como los fideos y la harina tengan su insumo, que es el trigo, a un precio estable en el año; pero la suba ha sido muy fuerte así que estamos evaluando si hay que reforzar ese fideicomiso o tomar otras medidas para abordar las tensiones en el mercado interno”, aseveró Kulfas en diálogo con la prensa radial.
Frente a ello, el Gobierno nacional constituyó la semana pasada un fideicomiso de 800.000 toneladas para garantizar el abastecimiento y el precio de los alimentos producidos en base al grano.
“El fideicomiso seguramente lo iremos ampliando en función de las necesidades que se presenten”, subrayó Kulfas.
Respecto de los efectos de la guerra, el ministro puntualizó: “En materia de efectos positivos está claro que las exportaciones van a valer más y va a haber más ingreso de dólares pero, al mismo tiempo vamos a tener que pagar más cara la energía que hay que importar”.
Por su parte, con relación a los precios, el presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), Miguel Pesce, aseguró que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) creará el marco de estabilidad necesario para que “las empresas cambien su actitud”, y en vez de recurrir a la remarcación de los precios de sus productos, opten por la inversión y el aumento de la producción para mejorar su rentabilidad.
Pesce sostuvo que “hay que trabajar con esfuerzo e inteligencia” para evitar que la suba de los precios internacionales de commodities como el trigo y el maíz repercutan en los precios internos, e impacten en forma negativa en la canasta alimentaria de la población.
“Estamos teniendo cuellos de botella en muchos productos de consumo masivo”, dijo el titular de la autoridad monetaria en declaraciones, en las que evaluó el cambio de escenario que significó la invasión rusa a Ucrania, en particular por el alza de los precios de las principales commodities.
En tanto, el presidente del BCRA resaltó el elevado precio del trigo, “que ayer (por el lunes) tocó los 475 dólares la tonelada, algo nunca visto”, y señaló que esos incrementos en los valores internacionales de cereales y oleaginosas “van a impactar en la canasta de consumo” y, en consecuencia, “hay que trabajar con esfuerzo e inteligencia” para neutralizar el traslado a los precios internos”.
En tanto, este lunes,se llevó a cabo en la Secretaría de Comercio Interior una reunión convocada por el subsecretario de políticas del Mercado Interno, Antonio Armando Mezmezian, para analizar la puesta en marcha del fideicomiso de trigo y el impacto de la suba del cereal en el precio local de la harina.
El secretario Roberto Feletti sostuvo -previo al encuentro- que “el fideicomiso para asegurar el precio de la harina y fideos con 800.000 toneladas de trigo es insuficiente con esta suba internacional”.
“Hace 20 días acordamos con los panaderos y molineros el precio del kilo de pan francés en un rango de $220 a $260 el kilo con una bolsa de harina a $1.300. Hoy (por el lunes) al mediodía nos reunimos, ese acuerdo se está resquebrajando”, afirmó.
Feletti dijo que “es el impacto del precio del trigo que hace que se retenga el grano”, y señaló que “los molinos, a pesar de que tienen (harina), también dudan porque no saben cuál es el precio”.
Asimismo, el titular de la Federación Industrial Panaderil bonaerense, Raúl Santoandré, se refirió a la “incertidumbre” sobre los precios y abastecimiento de harina, con un precio de la bolsa de 25 kilos ubicado en “2.000 pesos para arriba”.
“Las entregas no son normales, con un pedido de 50 bolsas mandan lo que quieren, en algunos casos excepcionales mandan harina con boleta abierta”, concluyó.