ESCUCHAREl área sembrada con trigo en la campaña 2015-2016 puede caer alrededor de 10% respecto del ciclo anterior, de acuerdo con las estimaciones de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) difundidas ayer.
El próximo ciclo triguero argentino se encuentra a unas tres semanas de comenzar en el país pero, según la especialista Sofía Corina, de la BCR, la situación permanece indefinida.
“La venta de semillas de trigo es inexistente respecto de otras campañas, en las que para esta época ya habían comprado y decidido la siembra en la zona Núcleo (sur de Córdoba y de Santa Fe y norte de Buenos Aires)”, indicó Corina.
Asimismo, hizo referencia a que más de mil millones de dólares permanecen “cautivos” en el campo argentino por el denominado “corralito triguero” impuesto por el Gobierno nacional, que impide liberar el cupo de exportación de la presente campaña.
Asimismo, explicó que los productores “todavía están concentrados en la cosecha gruesa y no pensando en sembrar”, y decidió que la superficie de trigo es “reducida respecto de la campaña anterior ya que la tendencia es a la baja”.
Con relación a lo que podría incentivar la siembra de trigo, la especialista consideró que “sería implantarlo después de la soja o el maíz para controlar la maleza, o si no reemplazarlo con algún cultivo de cobertura, como avena u otros”.
Y agregó que “la soja de segunda, sembrada después de trigo, está dando buen resultado, pero de todos modos no hay un incentivo económico, es más optar por un sistema de rotación y supongo que lo harán en campos propios y no arrendados porque los costos no dan”.
La superficie que en la campaña 2014-2015 ocupó 4,2 millones de hectáreas se reducirá a 3,8 millones para el presente ciclo, lo que sería similar al áres implantada durane 2013/14.
