ESCUCHAREl largo conflicto entre el Gobierno nacional y el sector agropecuario seguirá durante los próximos meses, aunque con una modalidad diferente que consistiría en la no comercialización y retención de granos en manos de los productores.
Así lo aseguró Juan Manuel Garzón, investigador del Ieral, quien, en el marco de los tradicionales almuerzos de la Fundación Mediterránea, indicó además que cerca del 40% de la producción cordobesa de soja correspondiente a la campaña 2007/2008, aún no fue vendida.
Si bien destacó que no se sabe a ciencia cierta “cuánta soja no ha sido vendida aún”, el número aproximado surge de la proporción de la campaña que “no está declarada como compra por ninguna industria o exportadora”, aseguró.
Esa porción de producción, a partir de la caída de la Resolución 125, “recuperó” 198 millones de dólares, valuándose entonces el porcentaje no vendido en Córdoba en 1.500 millones de dólares, según lo expuesto por Garzón.
Sin embargo, la cifra podría ser aún mayor de ser cierta la estimación que en ese sentido realizó Omar Gazzoni, vicepresidente de la Sociedad de Acopiadores de Granos de la Provincia, quien consideró que el porcentaje de cosecha no comercializada ascendería al 60%.
En ese sentido, el investigador del Ieral destacó que la “retención de los granos por parte de los productores será hasta que el panorama se aclare”; y se explayó sobre la pérdida del poder de compra del dólar-soja, que inclusive estaría un 35 ó 40% por debajo del registrado durante la convertibilidad.
“El productor hoy tiene que generar mayor producción de soja para poder comprar lo mismo que antes, aunque la diferencia a favor que tiene hoy el productor, y que no estaba en los 90, es el precio internacional tan alto”, explicó al tiempo que agregó que “hoy por hoy, los precios de las commodities mantienen el negocio agropecuario entre otras cosas tales como la balanza comercial y las finanzas nacionales”.
Por esta misma razón, también consideró que el campo postergará decisiones “evitables” tales como las inversiones en tecnología.
“Durante la convertibilidad, la maquinaria duraba cinco años; en estos tiempos, los productores las cambiaban cada dos. Yo estimo que ahora va a haber una vuelta y se extenderán los plazos de uso”, dijo.
Finalmente, destacó que el conflicto permanecerá, ya que fue generado por la acumulación de intervenciones en los mercados (granos, carne bovina y leche), y en estos cuatro meses no hubo ninguna medida concreta de que fuese a modificar esta política que hace “impredecible” el negocio.
| SIN CAMBIOS |
| “No va a haber grandes cambios a corto plazo; puede haber retoque de tarifas para bajar la carga de subsidios al Gobierno; van a seguir estimulando la demanda agregada con lo que va a persistir la inflación; habrá sectores que con el retraso cambiario empiecen a frenarse, con lo cual, la economía empezará a desacelerarse naturalmente”, indicó Gabriel Sánchez, presidente del Ieral. |
