Será desde octubre. Los valores fueron calculados respetando el sendero de precios del gas en boca de pozo fijado por el ex ministro Aranguren que, con un dólar disparado, impactan de lleno en la tarifa final. Sin embargo, la empresa ya logró renegociar con Enarsa. Si esa mejora se replica al resto, las subas rondarían 50%
Distribuidora Gas del Centro SA, concesionaria el servicio para Córdoba, La Rioja y Catamarca, propuso un aumento de tarifas finales a partir de octubre próximo de hasta 180 por ciento promedio para usuarios residenciales.
El aumento fue calculado tomando como parámetros los valores del gas en boca de pozo fijados en el sendero de precios definido por el ex ministro de Energía, Juan José Aranguren. Según aquel esquema fijado en 2017, en octubre de este año el precio del gas en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST) debía ser de 5,20 dólares por millón de BTU.
En ese marco -en función de la suba de costos y, particularmente, del valor del dólar que aceleró de manera contundente en los últimos días- la suba de tarifas finales a los usuarios, sin impuestos, debería alcanzar 180 por ciento promedio.
Los datos a los que tuvo acceso Comercio y Justicia aparecen reflejados en el anexo III de la propuesta de ajuste tarifario a regir desde el 1 de octubre,presentado por la distribuidora ante el Enargas y que será discutido el jueves próximo en audiencia pública.
Sin embargo, Ecogas presentó también una propuesta alternativa.
Se trata de la informada en el anexo IV, que es sensiblemente menor a la anterior. En cualquier caso, plantea aumentos de entre 40 y 50 por ciento promedio, según la categoría de usuario.
Esa alternativa surge de proyectar una reducción en el valor del gas en boca de pozo, en línea con la que la distribuidora negoció con Integración Energética Argentina SA (ex Enarsa) que, para el caso de Distribuidora Gas del Centro, explica prácticamente la mitad de insumo que adquiere en el PIST.
Esa propuesta incluye un valor del gas en boca de pozo de entre 4,05 y 4,40 dólares por millón de BTU para el período octubre 2018-marzo 2019 y pesificados a 31,47 pesos por dólar aunque sólo para el período octubre-diciembre de 2018.
Esa mejora permitiría a la distribuidora reducir sensiblemente los precios finales fijados en el escenario extremo para pasar a aumentos que, de todas maneras,serán de entre 40 y 50 por ciento.
En tanto, la distribuidora también logró un acuerdo con IEASA para renegociar el aumento del dólar que detonó la devaluación, a fines de abril. La diferencia por el tipo de cambio se pagará en 24 cuotas.
De acuerdo con los datos que la compañía informa en el material de consulta para fijar las tarifas que se debatirá el jueves en audiencia pública, el valor del dólar como tipo de cambio reconocido para la elaboración de las tarifas vigentes, era para septiembre de este año de $20,35 por dólar. Sin embargo, el cálculo de las tarifas finales se hizo con un dólar que, para agosto pasado se ubicaba en $37,50, según datos tomados del Rofex del 29 de agosto.
Para el cálculo de las tarifas, también se tomó en cuenta el Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) que mide Indec y que hasta agosto inclusive (para ese mes se proyectó 3,5 por ciento ante la falta de datos oficiales todavía) y desde marzo pasado, alcanzó 28,82%.
Por lo demás, la compañía también presentó cuadros tarifarios posibles para el período que se inicia en enero de 2019.
Además de las negociaciones con IEASA, Ecogas discute eventuales mejoras con YPF, Pluspetrol, Wintershall, Tecpetrol, PAE y Total.
“La situación es muy volátil y compleja para fijar valores futuros”, admitieron a este medio fuentes de la distribuidora.
Cómo quedarían las tarifas
Respecto a los cuadros tarifarios, en ambos escenarios, el valor del cargo fijo es uniforme. El principal cambio está en el precio del metro cúbico de gas.
Dentro de los usuarios residenciales, la propuesta de Ecogas es que, para el caso de un cliente R1, pase de 165,56 pesos a 213,2 pesos, esto es, 28,7 por ciento más elevado.
En tanto, en el otro extremo, un cliente R3 4, los de mayor consumo, pasarán de 712,13 a 917,3 pesos, es decir, 28,8 por ciento superior.
El porcentaje de aumento es igual para los usuarios P1 y P2, para los P3 y para el GNC, cuyo cargo fijo se elevará hasta los 7.077,5 pesos.
Escenario extremo
Si Ecogas avanza con la aplicación del sendero de precios original en boca de pozo, sin renegociar mejoras en esos valores y con un tipo de cambio como el actual, el valor del metro cúbico para un usuario residencial R1 pasará de los 5,05 pesos actuales a 20,27 pesos, esto es un 301 por ciento mayor al vigente. En tanto, para el R3 4, el metro cúbico pasaría a 29,14 pesos, lo que implica una suba de 271,6 por ciento.
Para un P1 y P2, que incluye comercios y pymes, el alza llegaría a 112,6 por ciento mientras que para el GNC ininterrumpible, aumentaría 115,36 por ciento hasta 9,39 pesos el metro cúbico.
Escenario “benévolo”
Si la compañía logra renegociar sus vínculos como ya lo hizo de IEASA, los precios serán menores a los anteriores aunque no por ello mucho más onerosos que los actuales.
Siempre con los valores del cargo fijo ya mencionados, esto es con alzas del 28,8 por ciento promedio, hay fuertes variaciones en el valor del metro cúbico con relación al cuadro extremo.
Por ejemplo, para un cliente R1, el metro cúbico subiría a 8,02 pesos, ajuste del 58,8 por ciento con relación al vigente.
En tanto, para un R3 4, el denominado cargo variable (m3) llegará a 9,46 pesos, apenas 20,6 por ciento superior al actual.
Diferente será el caso de comercios y pymes que pagarán un precio de 6,86 pesos por m3. El alza en ese caso llega a 92,6 por ciento.
Finalmente, para el caso del GNC ininterrumplible, el cargo variable será de 7,24 pesos desde los 4,36 pesos actuales. El aumento porcentual llegará en ese caso a 66,05 por ciento.
El aumento en la tarifa de gas se sumará al ya vigente desde abril pasado y al activado en noviembre último. Concretamente, en el último año, el gas natural, en este caso domiciliario, registró subas en torno al 100 por ciento, a las que ahora se sumarán los ajustes desde octubre próximo.
Puesto en cifras de una factura promedio, quien hace un año atrás pagaba 500 pesos promedio por bimestre, pasó a pagar 1.000 pesos desde abril y, si se aplicara al alza del 180 por ciento como caso extremo, pasaría a oblar 2.800 pesos.
Por el contrario, si la suba fuera la alternativa menor, la factura bimestral promedio llegaría a 1.500 pesos, sólo como ejemplo para evaluar el impacto de ese servicio.