Economía de la Nación dio el aval definitivo para el préstamo de $70 millones del Fondo Fiduciario de Infraestructura Regional. El primer módulo, para 500 internos, liberará la subasta de la ex Encausados por parte de Corincor.
El gobierno provincial licitará en los próximos días la construcción del primer módulo del complejo carcelario Bouwer II, luego de que el Ministerio de Economía de la Nación avaló la toma del endeudamiento necesario y de esta forma allanó el último escollo para contar con el financiamiento de 70 millones de pesos requeridos para avanzar con el proyecto.
La decisión, confirmada a Comercio y Justicia por fuentes del Ejecutivo provincial, permitirá al mismo tiempo acelerar los plazos para la venta de la ex carcel de Encausados que, según datos extraoficiales, podría aportar hasta 20 millones de dólares a las arcas provinciales.
No obstante, la enajenación de ese penal, que pasaría a manos de la Corporación Inmobiliaria Córdoba (Corincor) para su venta, no se realizaría antes de fin de año, según precisó la fuente.
Como fuere, la intención oficial es que el crédito para avanzar con la construcción del nuevo complejo carcelario se pague con lo producido por la subasta de Encausados -saldrá mediante el mecanismo de oferta continua- y del penal de San Martín, cuyo desalojo y venta llegarán en una segunda etapa.
En cuanto al valor de la ex Encausados, la referencia más inmediata es el predio de 2.675 metros cuadrados de la ex Villa Richardson (a pocas cuadras, aunque en Nueva Córdoba), que Corincor tiene en venta a un valor base de 13,1 millones de pesos. El predio, si bien mejor ubicado, es una cuarta parte del tamaño del terreno de la ex Encausados.
La posibilidad de avanzar con el demorado plan de infraestructura carcelaria, anunciado oficialmente por el gobernador Juan Schiaretti el 17 de marzo de 2008, se destrabó en las últimas horas luego de que la Secretaría de Hacienda diera el visto bueno definitivo a la operatoria para obtener el financiamiento necesario.
Se trata de un crédito gestionado ante el Fondo Fiduciario Federal de Infraestructura Regional, creado por la ley 24855, cuyos recursos se derivaron de la privatización parcial del Banco Hipotecario.
El préstamo, cuyo plazo de reintegro y tasa de interés no fueron informados, estará garantizado por la coparticipación federal de impuestos.
La gestión ante el organismo fue inicada tiempo después del anuncio de Schiaretti.
No obstante, el trámite ingresó en un lento proceso, que incluso llevó a las autoridades provinciales a sospechar de “trabas” por parte de la Nación, según lo anticipó este medio en mayo de 2009.
Es que, por entonces, la relación política entre la Provincia y la Nación se había tensado nuevamente a partir de la incipiente demora en los envíos de fondos del Programa de Asistencia Financiera (PAF) y para la cobertura del déficit de la Caja de Jubilaciones.
Con todo y después de más de dos años, el financiamiento atravesó todas las etapas y ya fue aprobado, por lo que es inminente el llamado a licitación para construir la obra.
Los proyectos
El plan carcelario, junto con la incorporación de nuevos agentes penitenciarios y la capacitación de los actuales, había sido anunciado por el gobernador Schiaretti el 17 de mayo de 2008, en el marco de la declaración de la emergencia carcelaria por un plazo de 36 meses.
En ese contexto, el mandatario había anunciado un plan de obras por un total de US$110 millones para la ampliación de la infraestructura penal.
El decreto incluía la construcción de tres módulos en el predio del Complejo Carcelario Francisco Luchesse, en Bouwer, con capacidad para 500 internos cada uno; un módulo en el mismo lugar, que remplazaría a la ex cárcel de Encausados, con igual capacidad; un establecimiento en Río Cuarto con lugar para 500 internos, que substituiría la vieja cárcel ubicada en esa ciudad, y una alcaidía general en Bouwer para contraventores, en dos módulos para 250 personas, con posibilidad de ampliación a dos módulos más.
“Con la construcción de estos nuevos módulos se cerrarán definitivamente estos dos establecimientos (Encausados y San Martín), que ya no cumplen la función para la que fueron construidos hace más de cien años, siendo instalaciones no adecuadas para el servicio penitenciario y ubicadas en la zona urbana de la ciudad de Córdoba”, había asegurado Schiaretti al presentar el plan.
De aquel anuncio, por ahora sólo está firme el primer módulo para Bouwer.