ESCUCHAREl Gobierno de Córdoba cerró el ejercicio 2022 con un resultado financiero de 100 mil millones de pesos, 47,9% mayor al registrado en el mismo período del año pasado.
En ese contexto, el resultado económico, esto es el denominado ahorro corriente, aumentó 114,7% y fue clave para solventar la inversión récord en obra pública que alcanzó 118.496,7 millones de pesos, 173,1% mayor a la observada en 2021.
Los datos aparecen reflejados en la Cuenta de Inversión del ejercicio, publicada ayer por el Gobierno provincial.
Según ese documento al que tuvo acceso Comercio y Justicia, los ingresos totales alcanzaron 1.171.893,4 millones de pesos, 77,6% por encima del año inmediato anterior.
En tanto, los gastos totales fueron de 1.077.893 millones de pesos, 82,06% más elevados que en 2021.
En definitiva, las erogaciones mostraron un aumento de cinco puntos porcentuales respecto a los ingresos totales.
En cuanto al gasto en personal, alcanzó 371.297,6 millones de pesos, 76,86% más elevados que en el año inmediato anterior. Ese aumento se ubica por debajo de la inflación registrada en el período que a escala nacional fue de 94,8%.
El aumento de la Inversión Real Directa y la mejora sustancial del ahorro corriente que subieron muy por encima de la inflación, fueron los dos datos distintivos de la Cuenta de Inversión informada.
De hecho, ese ahorro corriente se logró a partir de un aumento de los ingresos corrientes del 79,2% y una suba del gasto corriente de 71,8%, esto es siete puntos por debajo.
Precisamente, la fortaleza del resultado económico es uno de los ejes que alude el gobernador Schiaretti cada vez que tiene oportunidad de justificar la clave de porqué puede sostener un ritmo de obra pública récord, basado principalmente en ese ahorro corriente, sin mayor asistencia del Gobierno nacional y con crédito externo acotado a préstamos de organismos multilaterales o bien de fondos de inversión, entre ellos fondos árabes, o eventualmente de bancos como el BBVA o el Deutsche Bank.
Los números positivos con los que cerraron las cuentas públicas en 2022 podrían, sin embargo, no replicarse este año.
Esos datos, que aún no están disponibles, seguramente marcarán un deterioro en las cuentas producto de una recaudación que comienza a mostrar un desgaste en los últimos meses, mientras el gasto en obra también exhibe una desaceleración.
Evidentemente, las paritarias que terminaría acordando la Provincia con los estatales y ahora los fondos de Anses para cubrir el déficit de la Caja que no llegarán en línea con la pretensión original, serán claves para conocer en qué medida se deterioraron los números en los primeros meses del año.
