Incluye avanzar en una nueva Ley de Responsabilidad Fiscal. También, en desactivar todas las demandas judiciales pendientes por fondos. Paralelamente, busca que las provincias reduzcan la presión fiscal vía Ingresos Brutos y Sellos. Hubo acuerdo para que Buenos Aires desactive el reclamo por el Fondo del Conurbano, sin que las provincias resignen ingresos. Schiaretti calificó como positivo el encuentro. Baja de IIBB se neutralizaría con suba del Inmobiliario y mejora en recaudación
El Gobierno nacional propuso a las provincias avanzar en la firma de un nuevo acuerdo fiscal con ejes en el cuidado de las cuentas públicas -Ley de Responsabilidad Fiscal-, baja de impuestos y desactivación de juicios pendientes por fondos .
Paralelamente, quedó saldado el reclamo de las provincias por una eventual mejora en el Fondo del Conurbano Bonaerense. El planteo de la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, ante la Corte Suprema de Justicia será retirado. Su distrito obtendrá una mejora sustancial de esa partida; sin embargo, esos recursos no saldrán de la coparticipación a las provincias -tal como éstas temían- sino de las arcas de la Nación.
Los principales puntos del acuerdo fiscal propuesto ayer por el presidente Mauricio Macri a las provincias fue expuesto, al término de la cumbre entre el jefe de Estado y los gobernadores, por los ministros de Hacienda, Nicolás Dujovne, y del Interior, Rogelio Frigerio.
La reunión, de la que participaron todas las provincias -la mayoría representada por sus gobernadores-, fue calificada como “positiva” por el mandatario cordobés, Juan Schiaretti.
En ese marco, el gobernador destacó dos medidas informadas por el Gobierno nacional que van en línea con los planteos que Córdoba viene sosteniendo: “En primer lugar, que la restitución del Fondo del Conurbanono no surge de los fondos de otras provincias, sino que se hace cargo la Nación, tal cual lo venimos planteando”, dijo.
Por otro lado, Schiaretti señaló que Macri “dejó en claro que a fines del 2019 se terminan los subsidios que hoy tienen Capital Federal y el Conurbano bonaerense”. Ese punto tiene que ver con el sendero de reducción de subsidios principalmente al gas y a la electricidad propuesto oportunamente por el Gobierno nacional.
“El encuentro fue positivo”, señaló el gobernador. “Las medidas constituyen más equidad y más avance hacia el federalismo”.
También consideró “claves” las metas de “alcanzar gradualmente el equilibrio fiscal, eliminar el déficit fiscal, el gastar más de lo que ingresa fue lo que origino a lo largo de la historia argentina todas las crisis, porque se emite moneda y aumenta la inflación de manera galopante. Por lo tanto, es importante un compromiso para reducir gradualmente el déficit fiscal”.
En la misma línea, valoró la decisión de avanzar hacia una estructura tributaria que no penalice la producción sino que la incentive: “La estructura tributaria argentina no puede penalizar la producción; entonces, hay acuerdos para avanzar en esta dirección, para que -en vez de perjudicar la actividad productiva- se la incentive”, dijo.
“Éstos son los marcos del acuerdo del que seguramente durante esta semana se verá la letra fina; nos pasaron un borrador que tendrá que analizar nuestro Ministro de Economía, pero la dirección global en estos puntos que señalé me parece que es la correcta”, finalizó Schiaretti.
Certezas y dudas
La conferencia de prensa posterior al acto que encabezaron Frigerio y Dujovne dejó en claro que aún hay varios temas pendientes para cerrar un acuerdo.
De hecho, la reunión pasó a cuarto intermedio para el jueves próximo.
Llamó la atención que no hubiera en la rueda de prensa ningún gobernador.
Evidentemente, aún restan arduas negociaciones para poder anunciar un nuevo pacto.
Entre las certezas que surgieron del encuentro, la más importante -por lejos y, de hecho, la única concreta- es que Vidal desistirá del juicio ante la Corte por el Fondo del Conurbano.
Esa decisión no implica, en rigor, cambio alguno respecto a los fondos que hoy reciben las provincias.
Sin embargo, un fallo favorable a Vidal por parte del Máximo Tribunal -posibilidad muy lógica- o bien una determinación política de Macri también en esa línea habrían significado un esfuerzo fiscal que todos los gobernadores suponían iban a salir de la coparticipación primaria.
Para Córdoba, esa alternativa habría tenido un costo fiscal de unos siete mil millones de pesos anuales.
Despejado ese fantasma -la Nación aportará parte de lo que reclama Vidal-, ahora la discusión pasa por el resto de los puntos planteados.
En el caso de la Provincia, el apoyo a una nueva Ley de Responsabilidad Fiscal no parece un frente conflictivo.
De hecho, Córdoba participó de la redacción del documento que dio origen al proyecto. Además, cumple prácticamente con todas las exigencias de lo que la norma indica. En todo caso, habrá que ajustar el tema de nombramiento de personal en los últimos meses de mandato.
El resto son temas aún a discutir.
Más allá de los reclamos específicos que provincias afectadas por la suba de impuestos internos que afectan a las economías regionales, hay otros puntos aún no cerrados.
Por ejemplo, el “borrón y cuenta nueva” que mencionó Dujovne con relación a los juicios de las provincias con la Nación.
Según trascendió, hay 56 demandas por unos 340 mil millones de pesos.
Córdoba tiene aún varios frentes abiertos. Si bien ya desactivó algunas de las causas abiertas, entre ellas por la Caja de Jubilaciones y de EPEC, hay otras activas.
La idea que transmitió Macri y los funcionarios es que, si Vidal desiste del juicio por el Fondo del Conurbano, también el resto lo haga.
Cada provincia hará su ecuación. En principio, a Córdoba le convendría. Es que un fallo favorable a Buenos Aires no sólo incluiría los siete mil millones de pesos anuales a valor presente sino un retroactivo a cinco años.
Hechas las cuentas, es más lo que perdería Córdoba que lo que podría ganar, si todos los juicios pendientes con Nación se resolvieran favorablemente para la Provincia, entre ellos la decisión pendiente de la Corte respecto a la restitución del 15% que antes se detraía para Anses y que el Máximo Tribunal restituyó a algunas provincias, entre ellas a Córdoba.
Luego, el Gobierno decidió devolverlo al resto en forma gradual.
Sin embargo, está pendiente el pago del retroactivo, tema que la Corte ya resolvió para Santa Fe y San Luis y que la Nación aún no pagó.
No parece “un trámite” que las provincias vayan a desistir de los juicios sin más, aunque cada una tiene su propia realidad. El otro punto sobre el que subsisten dudas es el planteo de la Nación para que los distritos federales reduzcan la presión fiscal vía Ingresos Brutos y Sellos.
Ayer, Dujovne dijo que la baja de esos tributos se compensaría con la restitución del 15% que se detraía para Anses, por la mejora en los ingresos propios y coparticipables por la ampliación de la base tributaria -a partir de reforma impositiva y laboral- y por una baja en el gasto público.
Macri pidió que la baja de recaudación por Ingresos Brutos se compense, entre otras vías, por una suba del Inmobiliario, cuyas bases imponibles deberían propender a alcanzar la valuación del mercado.
La Provincia ya realizó algunas simulaciones. Con una economía creciendo a 3,5% anual, con una mejora gradual del inmobiliario y de la base de contribuyentes, se podría reducir de manera paulatina IIBB aunque no a la mitad, como quiere la Nación.
Con relación a Sellos, el tema aún no está claro. En todo caso, cualquier rebaja extra de IIBB recién se concretaría en 2019.