ESCUCHAREl encuentro atraerá a más de 400 participantes provenientes de Francia, España, Chile, Brasil y diferentes puntos del país. Sólo Fecovita comercializa 29 millones de litros mensuales, liderando el mercado.
Por una semana, sobre el fin del mes, Mendoza será la meca mundial del cooperativismo vitivinícola. Del 30 de mayo al 5 de junio la capital mendocina recibirá a cientos de representantes de organizaciones productoras de vinos de todo el mundo, ya que esa provincia será sede del Foro Mundial de Cooperativas Vitivinícolas.
Se estima que el encuentro atraerá a más de 400 participantes que vendrán de Francia, España, Chile, Brasil y de diferentes puntos de Argentina.
Según explicaron los organizadores, “el objetivo del encuentro es lograr un mayor conocimiento y una mejor integración entre las cooperativas vitivinícolas líderes en el ámbito mundial y con las que integran la Federación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (Fecovita) en todo el país, con el fin de potenciar acuerdos que permitan su desarrollo a escala internacional y nacional”.
Fecovita comercializa 29 millones de litros mensuales, posicionándose al tope del mercado interno. Comenzó sus tareas en 1980 y actualmente representa a unos cinco mil productores. “Somos líderes en el segmento de vinos comunes”, comentó recientemente ante la prensa Carlos Iannizzotto, consejero de la Fecovita, mientras repasaba el crecimiento de la entidad que está por cumplir 35 años.
A los debates que se realizarán en Mendoza se sumarán otras actividades que llevarán a los asistentes al foro a otras provincias de la región cuyana. De acuerdo con lo previsto por los organizadores, las delegaciones participarán en visitas a cooperativas de los oasis productivos de San Rafael y la provincia de San Juan, donde también se buscarán acuerdos de colaboración mutua entre los vitivinicultores cooperativizados de Mendoza y el resto del mundo.
Según publicó El Diario de San Rafael, el cronograma del foro ya confirmó la visita a esa ciudad para ver el funcionamiento de los productores asociados de ese departamento mendocino.
El año pasado, el encuentro fue realizado en Ciudad Real, en España, y reunió a cientos de representantes del cooperativismo mundial. Por ello, para el cooperativismo vitivinícola argentino se trata de una importante oportunidad para consolidar acuerdos que permitan ganar mercados en la región latinoamericana y en otros continentes.
Fecovita, que ya transita por su cuarta década, nuclea a cinco mil productores que venden sus uvas a unas 29 cooperativas que se encargan de elaborar las bebidas, “que en el segmento de vinos comunes llevan la delantera”, relató Iannizzotto, quien también es vicepresidente de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Cooperativa Limitada (Coninagro). Fecovita, que cuenta con unidades productivas en las provincias de Mendoza y San Juan, tiene entre sus marcas los reconocidos Vino Toro y Resero y abastece el mercado interno con 24 millones de litros mensuales.
“Además de sostener el liderazgo en el segmento de vinos comunes en el país, Fecovita busca nuevos mercados en el sector externo: “La situación es difícil debido al atraso cambiario, pero estamos en diálogo con compradores de distintos lugares”, confirmó.
Fecovita viene escalando posiciones en el movimiento cooperativo nacional, paralelamente a la consolidación de sus negocios. “Nuestro liderazgo es tal por la dirección que los pequeños productores ejercen y porque apostamos a fortalecer la cadena productiva; ésa es otra de las claves de nuestro éxito, porque cuidamos a quienes producen mediante la compra en cantidad de insumos para abaratarles costos y también por contar con seguros contra las inclemencias climáticas”, detalló Iannizzotto. “El crecimiento exponencial que fortalece el mercado interno nos hace los primeros en la elaboración de mosto”, indicó el consejero, quien también ocupa la gerencia en la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas.
“Las organizaciones productoras de vino, mosto y derivados enfrentan los desafíos que en general sufren las economías regionales. Los altos niveles de inflación erosionan estos productos en la canasta básica, paralelamente a la suba de los costos de gasoil, de salarios, entre otros “. Y agregó: “La política cambiaria hace que perdamos clientes pero tenemos diálogo con el Estado, nuestra relación es buena, de hecho tenemos propuestas. Nos parece pertinente aumentar la cantidad de reintegros y eliminar las retenciones para el mercado vitivinícola”. Sobre las más de tres décadas de historia, Iannizzotto expresó: “El asociativismo, la unidad, la integración de productores y una buena gestión son el factor de rentabilidad. Unirse solidariamente es, sin dudas, un gran negocio”.
