Cámaras empresariales de distintos sectores prevén recomendar a los gobiernos nacional, provinciales y municipales el establecimiento de regulaciones legales que determinen pautas para asegurar la continuidad del teletrabajo, más allá de la extensión de la pandemia de coronavirus.
Los borradores de propuestas de distintos asesores jurídicos que circulan entre los empleadores (por ejemplo, en las cámaras de Comercio y Servicios, CAC, y Argentina de la Mediana Empresa, CAME, entre otras), evalúan que la normativa sobre el teletrabajo sigue siendo “una asignatura pendiente”, que debe atenderse para corregir “falencias y debilidades del mercado laboral”.
Uno de esos documentos preliminares, del estudio jurídico García, Pérez, Boiani & Asociados, destaca que al interior del sector formal o estructurado del mercado laboral aparecen aún “profundas diferencias” en las prácticas de trabajo a distancia, mediante la utilización de tecnologías de la información y la comunicación.
Según ese enfoque, se observan, frente al aislamiento social, preventivo y obligatorio, algunas “islas de modernidad” en las empresas, donde la digitalización y la tecnología “trazan un sendero virtuoso hacia la revolución industrial 4.0, casi sin escalas”.
En otros casos, la expansión del teletrabajo “se ralentiza por el escaso nivel de inversión, la falta de crecimiento y la incertidumbre sobre el rumbo futuro de la Argentina”, de acuerdo con los abogados de empresas.
Los bufetes asesores advierten al respecto de que “no se cuenta con una legislación que regule y/o propicie el teletrabajo, trabajo remoto o home office”, como tampoco existe “una conectividad homogénea que llegue a todas las latitudes del territorio nacional, lo cual provoca brechas de productividad e incluso educativas”.
Entre los promotores del teletrabajo, la CAME resalta que esa práctica permite “agregar valor a los productos y servicios, aumentar ingresos, incursionar en nuevos mercados, reducir costos y optimizar recursos en general”.
En esa misma línea, la CAC programó para mañana la conferencia web “Teletrabajo: cómo generar productividad en equipos virtuales”, orientado a empresas que buscan adaptarse al nuevo contexto, que desliga la información de un lugar físico para ubicarla en cualquier dispositivo y da lugar a nuevas formas de organizar el trabajo.
Los estudios sobre las nuevas modalidades destacan que la pandemia “puso en evidencia la necesaria flexibilidad y adaptación con la que se debió responder a semejante desafío”.
“Esta crisis extrema nos muestra que continuar ignorando estas asignaturas pendientes contribuye a desproteger, a no estimular la generación de empleo e incluso acelerar su tasa de destrucción”, alertaron los asesores jurídicos.
Contrastaron en ese sentido los ejemplos de compañías en las que se pudo responder con rapidez al desafío epidemiológico, y aquellas donde se puso en evidencia, en materia de las condiciones de teletrabajo, “una mayor rigidez y ausencia de plasticidad para adaptarse al cambio de escenario”.