Ese organismo estima gastos por $31.699,1 millones e ingresos por $29.972 millones. No obstante, esta última cifra ya incluye casi $3.800 millones de aportes de Anses. El resto lo cubrirá el Tesoro provincial si la Nación no accede a aportar 100% del rojo. De hecho, por los datos incluidos en el Presupuesto nacional, no hay seguridad de que se vaya a enviar todo lo que se reclamará
La Caja de Jubilaciones, Pensiones y Retiros de la Provincia de Córdoba cerrará 2017 con un déficit de más de $5.600 millones, que el Gobierno buscará sea cubierto por la Nación en su totalidad.
No obstante, ante la “eventualidad” de que la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) no reconozca el monto completo, la Provincia ya presupuestó aportes del Tesoro por $1.823,8 millones para cubrirlo.
Los datos, a los que accedió Comercio y Justicia, aparecen reflejados en el proyecto de Presupuesto 2017 que el Ejecutivo envió a la Unicameral la semana pasada, que hoy comenzará a debatirse en comisión con la presencia del ministro de Finanzas, Osvaldo Giordano, y los secretarios de Ingresos Públicos, Heber Farfán, y de Administración Financiera, Mónica Zormberg.
Respecto a la Caja, la política relativa a ella resulta clave en función de la reciente baja de contribuciones patronales que, ante aportes personales que se mantuvieron sin cambios y un incremento en el gasto producto de las prestaciones a pagar, impactarán de lleno en el déficit previsto.
En ese marco, la apuesta se centra de lleno en la cobertura del rojo que afronte la Nación, atento al antecedente del acuerdo suscripto este año y en función de los alcances de la Ley de Reparación Histórica en lo referido al financiamiento del déficit de las cajas previsionales no transferidas.
Según los datos oficiales que seguramente expondrán hoy los funcionarios en la Unicameral, el total de erogaciones previstas por la Caja para el año próximo alcanza $31.699,1 millones.
Prácticamente la totalidad de ese gasto es para afrontar el pago de las prestaciones a los casi 100 mil jubilados y pensionados que tiene hoy el organismo. Esa erogación se cubrirá principalmente con ingresos de la Seguridad Social por $25.076,3 millones, provenientes de contribuciones patronales por $12.180,5 millones (ese ingreso se redujo luego de la baja dispuesta por la Provincia) y por otros $12.895,8 millones derivados de los aportes de los empleados que, salvo en el caso de los agentes bajo la órbita del Sindicato de Empleados Públicos (SEP) que aceptaron una baja de dos puntos porcentuales a cambio de una mejora salarial, el resto se mantuvo sin cambios.
En paralelo, se prevén ingresos por $869,3 millones de impuestos nacionales, concretamente del impuesto al Valor Agregado (IVA) y Bienes Personales, por $762 millones y $107,2 millones, respectivamente. Al mismo tiempo, se estiman recursos no tributarios por $229,4 millones. Ese total suma $26.175 millones.
La diferencia entre ingresos y gastos alcanzará al fin $5.524 millones.
No obstante, el planteo que se realizará a la Nación alcanza $5.620 millones, según los datos a los que accedió este medio.
De todas formas, ante la eventualidad de que la Nación no financie la totalidad del rojo, la Provincia trazó un esquema alternativo, que de hecho es el que figura en el Presupuesto.
Concretamente, estima que la Anses enviaría $3.797 millones y el resto, $1.823,8 millones, se completarán con aportes del Tesoro.
La posibilidad de que la Nación no cubra todo el déficit tiene su asidero. Más allá de que este año sólo reconoció $3.400 millones (el cálculo se hizo con base en el esquema del Pacto Fiscal de 1999), en el proyecto de Presupuesto nacional para 2017 figuran partidas por $14 mil millones para cubrir el rojo de todas las cajas no transferidas.
Así, una proyección de los fondos que le corresponderían a Córdoba en función de esa cifra indica claramente que no llegarán los $5.600 millones pretendidos.
Por lo demás, el tema del financiamiento del rojo previsional de Córdoba es un tema no sólo de preocupación para la Provincia sino también para los gremios que nuclean a los aportantes a la Caja.
De hecho, los sindicatos vienen alertando respecto al desfinanciamiento previsional producto de la baja en las contribuciones patronales, al tiempo que advierten de que los alcances de la ley de Reparación Histórica dejan abierta la puerta a una posible armonización futura con la Anses.