El titular del Grupo Construya aseguró que la inercia es la que impulsa todavía al sector. Cree que en 2019 comenzará a superarse esta crisis
Por Cecilia Pozzobon – [email protected]
“La construcción va a ver su piso de actividad dentro de dos meses. Todavía sigue, más lenta, impulsada un poco por la inercia, pero para fin de año debería verse un piso”, vaticinó entusiasta el presidente del Grupo Construya, Pedro Brandi, en el marco de una conferencia de prensa de la que participó Comercio y Justicia, realizada previo al inicio del Forum Construya Córdoba 2018 que se llevó a cabo ayer en el Sheraton Hotel y convocó a más de 500 personas.
“Hay que ser optimista”, aclaró y agregó: “Lo mismo sucede cuando arranca la actividad. Se demora, porque trae la misma inercia del parate”.
Para describir el estado en el que se encuentra esta industria, Brandi relató que el sector pasó por por una buena etapa durante el gobierno anterior. “El cepo cambiario que tuvimos, en lugar de perjudicar a la construcción, la favoreció. No así al sector inmobiliario. Hubo un boom de inversión impulsado por un boom de consumo. Con el nuevo gobierno, volvió la normalidad y el sector vuelve a ser rentable por sus propios medios y no porque le regalan una posibilidad. Antes no había otras opciones de inversión. Con este gobierno, la construcción compite con opciones financieras”, dijo.
Sin embargo, analizó que el país “nunca termina de despegar. La generación de pobreza se da por no tener equilibrio fiscal y por no ser capaces de generar prosperidad”.
Siguiendo con la descripción de la situación, Brandi indicó que a partir de una encuesta que el Grupo Construya realiza desde hace varios años, se sabe que hace unos años, 85% de las personas decían poner sus ahorros en la construcción. “Ahora, ese porcentaje bajó a 42% (último dato de abril pasado). Sigue siendo alto, pero es normal para Argentina, donde la gente que puede ahorra en ladrillos”, dijo.
“La nueva etapa que arranca con este gobierno -antes de esta crisis- es de normalidad, del resurgimiento del crédito hipotecario.Y la respuesta de la gente a la creación de las UVA y UIV fue impresionante. El fondo entregado en créditos hipotecarios pasó de $3.000 millones a $60.000 millones (medidos a pesos constantes)”, dijo.
Sin embargo, esta crisis cambiaria y también política modificó todo el panorama.
El caso de corrupción conocido como la “causa de los cuadernos” modificó la situación en la obra pública. “La obra pública representa 20% de lo que es el total de la actividad de la construcción. Ahora, la continuidad de esa obra va a ser ahora por medio de los PPP, en donde se ve el impacto de ‘los cuadernos’ porque los bancos no pueden prestar a las empresas que estén cuestionadas. Es un lío eso”, dijo.
Asimismo, reflexionó que el plan de obra pública “es enorme, tal vez desproporcionado a las posibilidades, ambicioso para la realidad que estaba viviendo el país”.
Según detalló, otro 20% se lo lleva la auto construcción y reparación; 45% es obra mediana-chica; en tanto que las grande representan entre 10% y 15%. “Cuando hay crisis, la primera que se para instantáneamente es la auto construcción y la de reparación. La obra pública sigue un poco por inercia y el resto, si es que están lanzadas, siguen pero a menor ritmo”.
En cuanto a los precios, aseguró que subieron menos que el dólar. “Como baja la demanda no se puede trasladar toda la suba. Hay una inflación contenida que se corregirá cuando el mercado empiece a moverse”.
Por otra parte, dijo que los grandes enemigos de la construcción son la inflación, las tasas altas de interés y la incertidumbre. “Ahora, con la tasa a 60% no sólo peligra la construcción sino otras actividades económicas”, refirió.
Finalmente, describió que el mercado cordobés es muy dependiente de la actividad agropecuaria. En la provincia, 34% de la actividad la impulsa el sector agropecuario. “La sequía nos está pegando de lleno”, refirió.
El economista Martín Tetaz anticipó consecuencias
Invitado a disertar en el foro, el economista Martín Tetaz explicó a los medios de prensa que el Gobierno llegó a esta crisis porque “abandonó la pelea contra la inflación en aquella conferencia del 28 de diciembre, perdió poder político en la aprobación de la reforma previsional y se quedó sin pólvora para reformas importantes como la laboral; luego se quedó por la mitad con la reforma impositiva, teniendo que incorporar el impuesto a la renta financiera -lo que fue un papelón- porque se cobra impuestos sobre los títulos que genera el propio Estado”, relató y agregó: “El Gobierno manejó mal cada una de las crisis, no dio señales claras, generó incertidumbre y todo esto llevó a una crisis de confianza. El plan del Gobierno es un fracaso rotundo. Hoy pasa lo que siempre en Argentina, las crisis se arreglan con devaluación”. Vale aclarar que descartó un “corralito”.
Consideró necesario “sorprender al mercado. Se necesitan tres cosas: detalles del acuerdo con el FMI, detalles del Presupuesto de 2019 y un cambio de gabinete” y agregó que esta crisis “va a tener consecuencias terribles en la economía real”. Según Tetaz, la clave está en estabilizar la corrida. “Si no se corrige rápido, se corre el riesgo de una corrida bancaria”.