ESCUCHAREl presidente del Banco de Córdoba, Daniel Tillard, se pronunció por avanzar en la ampliación del plan de negocios de la entidad con créditos a la inversión y al consumo.
Tillard, licenciado en Economía con paso por el Bapro, asumió ayer como nuevo titular de Bancor, en el marco del recambio de autoridades tras la jura de Juan Schiaretti como gobernador. Lo secundarán en la entidad Hugo Escañuela como vicepresidente (era el anterior presidente), Eduardo Gauna, como director Ejecutivo (ya estaba en el banco), Ramiro Sosa Navarro (hasta ayer responsable del Instituto de Investigaciones Económicas de la Bolsa de Comercio de Córdoba) y Marta Zabala (ex titular de Lotería de Córdoba), en estos casos como directores. En tanto, Gabriela Fábrega y Fernando López Amaya serán síndicos junto a Cecilia Vázquez.
Tillard fue puesto en funciones por Ricardo Sosa, ministro de Inversión y Financiamiento de la Provincia, en un acto que se concretó al mediodía en la sede de la entidad.
“Ordenado y solvente”
“El banco está ordenado, está solvente y con grandes expectativas de continuar creciendo con créditos a las empresas y familias cordobesas y brindando servicios financieros en toda la provincia”, señaló el flamante titular de Bancor. Asimismo, señaló que continuarán “trabajando con la red de sucursales y sus equipos que hacen fuerte al negocio”.
Por lo pronto, de acuerdo a los datos de los Estados Contables resumidos del banco al 30 de noviembre pasado, la entidad logró utilidades netas por 42,1 millones de pesos, 11,3 por ciento por encima de las registradas en el mismo mes del año pasado.
En tanto, en el acumulado de los primeros once meses del año, Bancor ganó 435,7 millones de pesos, apenas 1,7 por ciento más que un año atrás.
Resulta evidente que en ambos casos, la evolución es claramente negativa en términos reales con una inflación que se sitúa entre 20 y el 25 por ciento interanual.
Por lo demás, los indicadores de la entidad continuaron mostrando subas importantes, tanto en el activo (préstamos) como por el lado del pasivo (depósitos).
Con todo, los márgenes de utilidad se redujeron sensiblemente, según muestran los datos sobre la ganancia del período.
La baja del spread entre créditos y depósitos y la desaceleración en los ingresos por comisiones y demás servicios sumado a un incremento sostenido en los gastos administrativos, principalmente en el rubro personal, explican la erosión de las utilidades del banco.
En tanto, desde esta semana debería regir un nuevo incremento en la tasa por depósitos a plazo, conforme la suba convalidada ayer por el Banco Central.
