ESCUCHARCuando todo parece indicar que el Gobierno nacional cuenta con los votos necesarios en el Senado para aprobar hoy la estatización del sistema de AFJP, un informe de SEL Consultores afirma que el debate sobre el tema ha obviado un eje central: más allá de su modalidad de capitalización o de reparto, el sistema de seguridad social vigente en nuestro país no garantiza la cobertura a la mayoría de la población.
Las causas esgrimidas comúnmente para explicar la situación son el desempleo y la informalidad laboral, a las cuales también se suma la alta rotación en los trabajos. El informe de los consultores indica que en el sector privado más del 35% de los asalariados no posee un contrato registrado y, de ellos, más de la mitad tiene un trabajo intermitente.
“Sin mecanismos extraordinarios como las moratorias para los que no aportaron, la elevada informalidad hace difícil mejorar significativamente la cobertura”, precisa el trabajo.
Pero la situación de exclusión se produce también por el modelo de financiamiento del sistema. La seguridad social se nutre de contribuciones surgidas de los sueldos de los trabajadores registrados, pero también de recursos no contributivos que abonan todos los ciudadanos provenientes de la masa coparticipable y de impuestos como el IVA, Ganancias, Combustibles y Bienes Personales.
La investigación precisa que el año pasado los recursos tributarios girados a la Anses llegaron a los $19.000 millones, a los que se agregaron otros $13.000 millones de “contribuciones figuartivas”, provenientes de rentas generales.
De esta manera, según el trabajo “casi la mitad de los recursos que maneja la Anses son no contributivos” y de cada $1 de prestaciones del Sistema Integrado de Jubilaciones y Pensiones, 32 centavos son pagados con esos fondos. “Esto lleva a situaciones de inequidad, en particular para los más pobres que no acceden a la seguridad social”.
Ante esta situación, la consultora concluye que “pensar cómo cubrir a una alta proporción de la población, hoy al margen del sistema de seguridad social, es tan importante como elegir cuál es el mejor modelo para los que ya están incluidos”.
