El ministro Francos deslizó esa posibilidad. El motivo es que no llegará a tiempo la sanción de la Ley Bases y del paquete fiscal, aun con los cambios que el Ejecutivo ahora está dispuesto a realizar a los proyectos que llegaron de Diputados. Sigue el debate en comisiones
El ministro del Interior, Guillermo Francos, deslizó la posibilidad de que el Gobierno posponga el “pacto de mayo”, convocado por el presidente Javier Milei para comprometer a la dirigencia en una serie de políticas de Estado, si el Congreso no aprueba la Ley Bases.
“Son decisiones que se tomarán en el momento que sepamos cómo termina todo esto. Es una película de suspenso: si se aprueba o no se aprueba, se llega, no se llega. Cuando sepamos qué fecha manejamos tomaremos la decisión; por ahora es ir al Pacto de Mayo”, amplió. “Tampoco me parece tan importante. Si se termina, bien y, si no se termina, veremos qué hacemos con el Pacto de Mayo, si lo hacemos en mayo, si lo postergamos y lo hacemos tratada la ley”, completó.
Lo cierto es que ayer continuó el debate en comisión de la Ley Bases y el paquete fiscal, con la decisión ya asumida por el Gobierno de aceptar cambios a ambos proyectos.
En esa línea, la oposición dialoguista sinceró en las últimas horas todas las modificaciones que le reclama al Gobierno para avanzar con las dos iniciativas en el Senado.
Los temas son variados y conseguir un acuerdo insumirá varios días.
En forma paralela a esta discusión, un plenario de las comisiones de Legislación General; Presupuesto y Hacienda; y Asuntos Constitucionales de la Cámara Alta continuó ayer con la exposición de invitados de diferentes bloques. Si bien la intención era finalizar ayer con las disertaciones, éstas se retomarían el jueves, ya que hoy dará su primer informe de gestión el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, en el recinto del Senado.
La bancada de la Unión Cívica Radical (UCR), que comanda el correntino Eduardo Vischi, se reunió para repasar todas las sugerencias que envió al Gobierno en relación con las modificaciones de los dos proyectos. El objetivo del bloque es olvidar la división que hubo en Diputados y encontrar una postura en común.
Durante el cónclave hubo rispideces por la cumbre -sin aviso- de días atrás del titular del partido, el senador por la Ciudad de Buenos Aires Martín Lousteau, con el ministro del Interior, Guillermo Francos.
A pesar de ello, la UCR enfocó los pedidos de cambios en el Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) y así amortiguar un potencial golpe a la industria local; y alertas sobre el blanqueo no sólo por años hacia atrás a considerar, sino también con la desactivación de familiares de funcionarios y el impedimento sobre el ingreso de criptomonedas.
En cuanto a Ganancias, la UCR primero quiere observar las definiciones de gobernadores. Otro ítem es la polémica por el Monotributo social que se dio en Diputados. Las más de dos horas de encuentro también sirvieron a los radicales para exigir un tratamiento acelerado por jubilaciones -la Cámara Baja puja también por ello- y aumentar gastos para las universidades.
Antes de que se iniciara el fin de semana pasado, Santiago Caputo, asesor de Milei, se comunicó con un par de senadores para encargarse, de manera personal, de blindar adhesiones. Al principio hubo algún entendimiento. No obstante, en las últimas horas reaparecieron ruidos con gobernadores patagónicos y se reactivó el temor por consensos no cerrados.
Una cuestión delicada desde el vamos y que se agravó en las últimas horas fue la reinstauración del impuesto a las Ganancias. Todos los mandatarios provinciales desean ese -progresivo- tributo, pero muchas de sus terminales legislativas no apoyarán. La suma de rechazos preocupa y el Gobierno aún no le encuentra la vuelta.
El capítulo vinculado al impuesto al tabaco también genera diferencias.
Las cartas aparecerían recién en la previa de la firma de dictámenes que podría ocurrir el próximo jueves, plazo que se autoimpone el oficialismo pero que no pareciera vaya a cumplirse.