Los monotributistas de las categorías más altas deberían presentar una Declaración Jurada Informativa cada cuatro meses. La primera presentación sería en junio y, luego, habría que volver a hacerlo en septiembre, enero y mayo, en coincidencia con las fechas de recategorización de este sistema, según trascendió ayer de fuentes de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) citadas por el diario Clarín.
Según el informe, en el organismo recaudador explicaron que la medida apunta a empezar a controlar el régimen. Y aclararon que no por ser simplificado -el Monotributo unifica en un solo pago el IVA, el impuesto a las Ganancias, la obra social y la jubilación- el sistema debe dejar de ser fiscalizado.
Aunque el impacto del Monotributo en la recaudación es bajo, comprende una cantidad muy amplia de contribuyentes. Son unos dos millones (aunque el número de los que cotizan ronda casi 1,4 millones de personas), “de los que hay muchos que deberían estar en el Régimen General porque superan los parámetros del Monotributo. Sin embargo, se refugian allí para pagar menos y no ser fiscalizados. Empezamos con las categorías más elevadas y, después, seguiremos avanzando”, indicaron fuentes de la AFIP.