ESCUCHARLa planta local fabricará bajo un mismo chasis los modelos Nissan Frontier NP300, además de otros dos modelos, bajo las marcas Renault y Mercedes- Benz. Implicará una millonaria inversión, alta integración regional y una importante demanda de mano de obra calificada. Apuntará almercado Latinoamericano.
Por Adolfo Ruiz – [email protected]
Hoy se anunciará en Buenos Aires una de las noticias más esperadas por el sector de la industria automotriz de Córdoba. Se trata del proyecto de mega inversión que concretarán las empresas Renault Argentina y Nissan, que conformarán un inédito joint venture con la alemana Mercedes-Benz.
El ambicioso emprendimiento permitirá fabricar en la tradicional factoría cordobesa tres diferentes modelos de pick up. Uno de ellos será la Nissan NP 300 Frontier, modelo insignia de la firma nipona, que actualmente se produce en México. Pero, además, utilizando la misma plataforma (un “chasis común”, detalló una fuente consultada por Comercio y Justicia), se fabricará también una pick up bajo la marca Mercedes-Benz, para un segmento superior, y otra con el tradicional rombo de Renault, que apuntará un escalón debajo de la Frontier. Ninguna de estas dos últimas tiene aún asignado el nombre comercial con el que saldrán a mercado.
De este modo, las tres firmas concretarán una fuerte apuesta para ocupar un segmento del mercado actualmente dominado en la región por los modelos Toyota Hilux y Volkswagen Amarok.
Los tres nuevos vehículos compartirán un motor biturbo diésel de 2,5 litros, que probablemente será fabricado en Brasil y ensamblado en Argentina, aunque todavía no está descartada la posibilidad de producirlo localmente (incluso se menciona la fábrica MWM, instalada en Jesús María y de capitales brasileños). Se integrarán dentro del segmento de los LCV (vehículo comercial ligero, por sus siglas en inglés) y está previsto que sean modelos con tracción integral y doble cabina.
En ese contexto no resulta un dato menor el hecho de que Mercedes-Benz producirá por primera vez en los últimos 40 años una camioneta en Argentina. Y, a diferencia de lo que se especulaba en las últimas semanas, no lo hará en su planta de Virrey del Pino, en la provincia de Buenos Aires, donde actualmente fabrica su modelo Sprinter. Los tres modelos buscarán como mercado a todo el continente, apuntando a Brasil en primera instancia, pese a la retracción que muestra la demanda del principal socio del Mercosur.
Inversión histórica
En la tarde de ayer, los directivos de las tres firmas le presentaron el proyecto final a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner; está previsto que hoy -simultáneamente con la presentación oficial en el país- se firme un contrato en Nueva York, en el cual las tres automotrices suscribirán la alianza estratégica para la producción de estos modelos.
Si bien aún no trascendió el monto de la inversión, diversas fuentes -entre ellas el propio director de Renault, Thierry Koskas- habían dado señales de que se trataría de cifras “históricas, como las que nunca se han visto en Argentina”, según lo verbalizó meses atrás el ejecutivo. De hecho, la puesta en marcha de este proyecto implica prácticamente “construir una nueva planta dentro de la actual planta”, tal como le fue descripto a este diario.
El antecedente inmediato en materia de inversión directa son los 100 millones de dólares confirmados en el mes de febrero, cuando se ratificó el proyecto para fabricar en Córdoba los modelos Sandero, Sandero Stepway y Logan.
Pero para el caso de las tres nuevas camionetas, la cifra seguramente será varias veces mayor, teniendo en cuenta el volumen de las modificaciones que se deberán hacer. “El impacto industrial es muy importante”, adelantaron, apuntando a que se deberán poner en funcionamiento nuevas líneas de montaje, de soldadura, de pintura, entre otros procesos indispensables para lograr fabricar estos modelos, que implican una demanda industrial muy superior a la de los vehículos que actualmente se fabrican.
