Cambio climático: qué es y cuál es el alcance de la modificación de la radiación solar

Por Luz Saint Phat / [email protected]

Que Argentina haya registrado el verano más cálido en seis décadas durante este año es sólo un pequeño indicador del fenómeno conocido como cambio climático. ¿Una tecnología de vanguardia podría mitigar el aumento de la temperatura global?

Recientemente, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) divulgó que el país enfrentó esta temporada el verano más cálido en 60 años. Según esos datos, la temperatura subió 1,3 grado por encima de lo normal para esta época. 

“Este verano vuelve a marcar un récord de temperaturas más elevadas; con récord del verano más cálido y además con récords en cantidad de olas de calor, que no solamente hubo muchas sino que fueron tempranas, ya que la primera se registró a fines de la primavera”, señaló sobre esta información Cindy Fernández, comunicadora del servicio. 

Agregó que a esto se sumarán “las olas de calor tardías, que, si bien aún no se las declaró ola de calor, es muy posible que esta semana (por los primeros días de marzo) muchas localidades la registren nuevamente”.

“Ésta es la primera vez que hay tantas olas de calor. Cuando mirás los datos para atrás no suele haber más de cuatro o cinco por verano. Este año ya duplicamos la cantidad”, resaltó la especialista, y confirmó que “este verano se está comportando de manera extremadamente cálida en Argentina, algo que no es novedad porque las temperaturas van en aumento”.

Más allá de las cuestiones estacionales y regionales, lo cierto es que este fenómeno de incremento en la temperatura se enmarca en las problemáticas provocadas por el cambio climático, que han tenido amplia agenda en los últimos dos años en el ámbito internacional. 

Tal como se observa, las consecuencias de la suba son devastadoras si se tiene en cuenta no solo el calor sino también la sequía que actualmente también afecta al país; o el frío extremo que se vivencia en otras latitudes. 

Al respecto, la mayoría de los países ha ratificado su compromiso (al menos en el marco de los acuerdos de la COP27 del año pasado) a desarrollar herramientas y estrategias de mitigación que permitan lograr objetivos de sostenibilidad hacia 2030. 

Una de estas posibilidades es la conocida Modificación de la Radiación Solar (MRS), sobre la cual el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma) emitió recientemente un documento de expertos.