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“Han ocurrido tres revoluciones industriales y en la actualidad estamos en proceso de la cuarta. Así, la historia del hombre ha empezado por la mecanización, pasando a la producción en masa y luego a la digitalización. Finalmente llegará a espacios ciberfísicos, que será la Revolución 4.0. La ‘vieja globalización’ producida por el transporte de bienes a través de las fronteras está dando paso a una nueva: Más de la mitad de los flujos económicos transfronterizos son de intangibles. Los países más prósperos son los que se adaptan a este mundo. Formar parte de los intercambios de generación y aprovechamiento de conocimientos e innovación productivos internacionales, es crucial para América Latina. Entrar a la cuarta globalización implica preparar su acceso a la economía planetaria basándose en la innovación, conocimiento, diferenciación cualitativa y atributos competitivos, con empresas calificando por lo expresado, más que sus propios productos, con exportaciones en las que el conocimiento sea el factor crítico. En función de lo expuesto, y teniendo en cuenta que el futuro no está lejos, se deberán desarrollar los activos intangibles, más valiosos para los próximo 50 años: creatividad e innovación, ya que el mundo será definitivamente digital, global, transparente y seguro”.
Estos conceptos más desarrollados se encuentran en el libro Cómo exportar servicios y no morir en el intento, de autoría Gustavo Fadda, magister y especialista en comercio exterior que se presenta hoy a las 19 en el Instituto Saber, en Chacabuco 326, ciudad de Córdoba. Cupos limitados.
