El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, recordó que “la pandemia no ha terminado en el mundo, ni en Argentina, ni en la ciudad de Buenos Aires” y advirtió sobre la situación de los países que perdieron lo que definió como “dos grandes barreras”: la protección inmune y el uso de barbijos y ventilación.
“Sabemos las líneas generales del comportamiento de la pandemia porque Europa nos anticipa, pero cada una de las olas que van viniendo encuentran situaciones epidemiológicas diferentes en cada lugar”, sostuvo Quirós en su habitual conferencia de prensa de los jueves.
“Las proyecciones iniciales que se hacían en base a lo que pasaba en Europa y que luego iba a suceder acá empiezan a separarse cuando comienzan dos situaciones: la tasa natural de contagio y la tasa de vacunación al momento de ingreso de las variantes”, añadió.
Quirós destacó que cuando la variante Delta en ingresó Sudamérica la población estaba “relativamente más vacunada” que cuando lo hizo en Europa.
En esa línea, dijo que dado que los escenarios de inmunidad natural y adquirida son diferentes es difícil hacer proyecciones.
Sin embargo, alertó que lo que sí puede observarse es que frente a la variante Delta, como tiene una alta tasa de contagiosidad en escenarios donde se pierden las “dos grandes barreras”, los casos pueden dispararse.