El alcoholismo está generando estragos en Inglaterra y Gales desde el inicio de la pandemia de coronavirus y en 2020 causó cifras de muertos nunca antes registradas.
Así lo certificaron datos difundidos por la Office for National Statistics (ONS), que consideró las repercusiones de las medidas restrictivas en la vida social y los bloqueos impuestos por el flagelo en el Reino Unido.
Según la ONS, en el último año el abuso de alcohol provocó o contribuyó a provocar 7.423 fallecimiento, un incremento del 20% respecto a 2019.
En línea con el alarmante informe, la cadena BBC de Londres reportó que la mortalidad por alcohol aumentó significativamente desde marzo de 2020, cuando la emergencia sanitaria llevó al gobierno de Boris Johnson a introducir el primer cierre nacional.
Las estadísticas reflejan que las personas que residen en las zonas más pobres y marginales del país -en particular, los hombres- están cuatro veces más expuestas a los efectos letales del consumo de alcohol que los habitantes de las regiones prósperas.