El Día del Profesional Universitario se celebra en homenaje a los profesionales que el 15 de septiembre de 1975 convocaron a un paro general para repudiar los hechos de violencia y privación ilegítima de la libertad que estaban sucediendo en el denominado Operativo Independencia, instaurado en Tucumán ese año.
El sector profesional estaba dispuesto a asumir un papel protagónico en defensa de legítimos derechos y su conciencia para hacer oír su voz en resguardo a los valores democráticos toda vez que un objetivo común debiera ser resguardado y atendiendo a valores colectivos que iban más allá del estamento profesional. Así quedó plasmada esa fecha que cada año nos recuerda el aporte que los y las profesionales realizan a la construcción de nuestra sociedad.
La Profesión Bioquímica
Desde sus comienzos, en el año 1919, la bioquímica creció de acuerdo al avance científico y tecnológico ocupando un lugar destacado en el cuidado de la salud, el desarrollo de investigaciones básicas y aplicadas, en áreas como medioambiente, industria o gestión.
Dentro del conjunto de titulaciones oficiales, el artículo 43° de la Ley de Educación Superior (LES) la bioquímica está dentro del subconjunto de “títulos correspondientes a profesiones reguladas por el Estado, cuyo ejercicio pudiera comprometer el interés público poniendo en riesgo de modo directo la salud, la seguridad, los derechos, los bienes o la formación de los habitantes. Esto da idea de la relevancia de nuestra profesión para la sociedad en su conjunto y por tanto la enorme responsabilidad que asumimos en cada intervención profesional y por lo cual la Bioquímica tiene dentro de sus alcances, “actividades reservadas”.
Esta enorme responsabilidad que conlleva el título académico y el ejercicio profesional Bioquímico requiere de un merecido reconocimiento social por la complejidad de sus múltiples responsabilidades, como por la variedad de campos de intervención que además de la la realización de análisis clínicos ponen a los y las Bioquímicos/así en lugares de toma de decisión permanente sobre cuestiones que afectan a la salud y la vida de las personas y al bienestar de la sociedad. La formación y la matrícula habilitante de la profesión y sus especialidades, diecinueve en total, nos hace responsables de realizar, certificar e interpretar análisis para prevención, diagnóstico, pronóstico y tratamiento de enfermedades en seres humanos, análisis bromatológicos, toxicológicos, de química legal y forense en humanos, así como ejercer la dirección de actividades técnicas de los laboratorios en que se realicen dichas prácticas y auditar y certificar laboratorios de análisis.
Los y las bioquímicos/as ejercen las diferentes especialidades: Bioquímica Clínica, Bromatología, Citología, Endocrinología, Emergentología, Gastroenterología, Gestión de calidad, Hematología, Hemostasia, Inmunología, Inmunohematología, Micología, Microbiología, Nefrología y medio interno, Parasitología, Perinatología, Salud Pública, Toxicología y Virología, diecinueve áreas de especialización que implican una capacitación permanente y un aporte central en los diagnósticos en salud.
Se comprende así todo lo que hay tras el ejercicio profesional boquímico, una compleja trama de interacciones y procedimientos técnicos tendientes a garantizar la calidad y confiabilidad de cada resultado.
En el último año y medio es de destacar el aporte diario y sostenido de la profesión a la salud pública desde la propia secuenciación del genoma de las variantes de SarsCov II presentes en el país, el diagnóstico de Covid19, el desarrollo de equipos diagnósticos hasta la carga de datos al sistema informático en salud lo que ha facilitado la construcción de conocimiento en la dinámica de la pandemia.
En este contexto particular debemos destacar la presencia y lucha permanente de bioquímicos/as junto a todas las disciplinas y trabajadores de salud que han expuesto su salud e incluso la vida en algunos casos y en condiciones de trabajo que no siempre son las mejores, para salir adelante como sociedad.
Creemos que esta fecha se presenta como una oportunidad para que la comunidad profesional reafirme su compromiso de ser siempre comprometida, ética, generosa y bien organizada. Hemos llegado hasta hoy gracias a sostener estos valores y profundizarlos cada día.