El Grupo Ad Hoc de Tenedores de Bonos del Canje de Argentina advirtió en febrero que el país necesitaba “desesperadamente” un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), y lamentó que ese acercamiento quedara, en su opinión, “subordinado a la política”.
“Un programa del FMI es la única fuente probable de anclajes políticos y un marco creíble a mediano plazo que pueda aportar estabilidad. Sin embargo, el Gobierno parece estar contemplando seriamente la posibilidad de retrasar un acuerdo para tener la libertad de continuar con sus políticas insostenibles aún más tiempo. Con las reservas ya en niveles peligrosamente bajos, tal estrategia equivale a una apuesta temeraria”, señalaron los bonistas durante el segundo mes del año.