ESCUCHARSe juntaron las cooperativas y mutuales gráficas, radiales, televisivas, telefónicas y tecnológicas para crear Coomunicar, el nuevo espacio que coordinará las acciones del sector en diversos frentes. Buscan ampliar negocios ante lo que consideran “una oportunidad histórica”.
Representantes de más de 1.300 cooperativas, mutuales y pymes relacionadas con la comunicación lanzaron Coomunicar, una red nacional que concentrará los esfuerzos del sector en materia editorial, gráfica, televisiva, audiovisual, radial, telefónica así como en los servicios de Internet y producción de contenidos, bajo el eje “haciendo juntos hacemos más y hacemos mejor”.
Por medio de Coomunicar, la economía solidaria profundizará su proyecto en materia comunicacional con nuevas operadoras de TV por cable, Internet y telefonía, más kilómetros de fibra óptica, mayor presencia en el mercado editorial, cableoperadores cooperativos y software libre, entre otras iniciativas que hasta ahora viene promocionando Usina de Medios, programa conjunto de la Confederación Cooperativa de la República Argentina (Cooperar) y el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes), dependiente del Ministerio de Desarrollo Social.
Se trata del “gran salto” hacia delante de un sector con fuerte presencia en los servicios públicos e inserción en el campo y otras áreas, que visualiza en el negocio de los medios, la Internet y los celulares la “oportunidad histórica” para ocupar territorios centrales de la economía y ya no espacios marginales del producto nacional.
Excedentes y ganancias por más de 20.000 millones de pesos tienen esas actividades hasta ahora monopólicas y en manos de unos pocos grupos, en su mayoría de origen extranjero. “Hoy vemos que existe un escenario histórico para que la economía social se inserte fuertemente en esos negocios”, relata Nahúm Mirad, titular de la Usina de Medios cooperativos. “Los emprendimientos que ya tiene el sector, las políticas de Estado vigentes, los nuevos marcos regulatorios en materia de medios y de telefonía, así como la infraestructura existente nos dan la oportunidad histórica para fortalecer lo que tenemos en marcha, ampliar la inclusión social en estos mercados y hacer de la comunicación un servicio público de calidad y al alcance de todos”, precisa el dirigente cooperativo que integra, además, Comercio y Justicia Editores.
A estas sociedades y empresas que hoy producen uno de cada diez pesos que se mueven en la economía nacional, una buena inserción en los mercados mediático y telefónico les permitiría captar porciones de excedentes millonarios y disparar sus cifras de negocios en al menos 25 por ciento, pasando de un peso de 10 por ciento en la economía nacional, a uno de 12,5 por ciento proyectado.
De hecho, visualizado en su conjunto, el sector cooperativo y mutual ya es un jugador de peso en los servicios. Tiene 700 cooperativas telefónicas, 400 que brindan el servicio de TV por cable, 500 periódicos y revistas asociados, 40 imprentas, gran cantidad de radios, administra 2.000 kilómetros de tendidos propios de fibra óptica y ya viene jugando en el mercado de los celulares con “Nuestro”, presente en 50 localidades, principalmente bonaerenses. De todos modos, toda esa estructura no es nada comparada con la posibilidad de ocupar 33 por ciento de todo el negocio audiovisual (tal como lo prescribe la Ley de Medios) y de hacerse cargo de 25 por ciento de las frecuencias de celular, que el Estado reservó desde 2012 para cooperativas, mutuales y pymes.
En perspectiva, los nuevos negocios del cooperativismo también pasan por lo digital. Al proyecto de “data centers móviles” que anunció la flamante Federación de Cooperativas Tecnológicas se suma el desafío de desarrollar y consolidar un amplio sistema de distribución de Internet, principalmente en lo que se conoce como “última milla”, vale decir la prestación del servicio a hogares, ya que en esas redes comienzan a converger todos los servicios y contenidos, en los que se conoce como N-Play.
“La convergencia es una realidad. Y así hay que entenderlo”, afirma Damián Kizner, uno de los presentadores de la nueva red cooperativa de infotelecomunicaciones. “El cambio de tendencia es crucial”, insiste y agrega: “Así como tecnológicamente vamos a hacia una sola pantalla, la tendencia es a contenidos trasmedia. Los públicos vuelven a ser locales” y allí es donde las organizaciones solidarias comunitarias juegan un papel especial.
