La especulación financiera “sigue haciendo presión” sobre el precio final de los alimentos a nivel mundial, ya que los contratos a futuro representan actualmente el 45% de los negocios con esos productos, según la consultora Abeceb.com.
Sin embargo, el informe apunta a la “creciente demanda real de alimentos de los países en desarrollo” como el “factor determinante” en la suba de los bienes.