“Para que las leyes laborales tengan vigencia real, cumplimiento efectivo, tienen que sustentarse en el consenso y una Ley de Riesgos del Trabajo (LRT), con la cantidad de intereses que conmueve, también lo requiere”. Así, el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, llamó al diálogo de los sectores involucrados -empresas, empleados y aseguradoras de riesgos del trabajo (ART)- para avanzar en el entendimiento de una nueva norma. Lo hizo durante la apertura del Congreso Regional de Recursos Humanos, organizado por Universidad Blas Pascal (UBP) que continúa hasta hoy en el Hotel Sheraton.
Luego, Tomada se reunió con un grupo de empresarios, catedráticos, jueces y referentes de la sociedad, que le planteó, entre sus principales preocupaciones, la necesidad de concretar definitivamente una nueva norma sobre accidentes y salarios, “que cada vez alcanzan menos a su personal, generando insatisfacción, malestar y pérdida de competitividad de las empresas”.
Sobre las previsiones en el corto plazo, el ministro dijo que hay respuestas que requieren acciones conjuntas con la Secretaría de Industria y el Ministerio de Economía, porque competen a todo el sistema económico y no solamente al sistema de trabajo, según comentó el rector de la UBP, Eduardo Sánchez Martínez, a la salida de esa reunión convocada por la Cámara de Comercio de Estados Unidos en Argentina (AmCham).
Antes, cuando se refirió a la LRT ante el público del congreso, Tomada había señalado que la nueva ley tiene que colocar como objetivo escencial la salud y la seguridad del trabajador. “En segundo lugar -agregó-, que respete en plenitud los principios constitucionales. La ley anterior, que según parecía tenía tanto consenso, promovió 25 tachas de inconstitucionalidad; se caía cada vez que cambiaba un miembro de la Corte Suprema. Los empleadores y los trabajadores no merecen tener una ley tan frágil”, añadió, advirtiendo que “el tercer requisito es una ley que dé certidumbre jurídica, fáctica a los trabajadores, a los empleadores y a las aseguradoras de riesgos de trabajo”.
Conflicto rural
Por otra parte, Tomada eludió responder acerca de si existe alguna propuesta de la Presidenta para superar el conflicto con el campo. “No sé, no conozco eso”, respondió.
Sin embargo, sobre sus efectos, reconoció que “hay un primer daño que surge de algunos frigoríficos que han tenido que suspender transitoriamente sus actividades”. Y concluyó: “Por lo demás, somos optimista y pensamos que prontamente (el tema) va a estar normalizado”.
UOM/SMATA |
Tomada dijo no estar preocupado por la falta de acuerdo en las rondas salariales de UOM y Smata, sin embargo reconoció que esos sectores “son los más importantes” y que la negociación “tiene su complejidad”. Como contrapunto, dijo que el 60% de los de convenios ya cerraron. Otro dato: 37,3% de trabajadores siguen en negro. |