Alcanzó 42% de los votos. Juez obtuvo 30% y Aguad 23%. El triunfo de Unión por Córdoba se asentó en el interior, donde obtuvo decisiva diferencia. El Frente Cívico ganó en Capital aunque perdió buena parte de su caudal histórico. Unión por Córdoba arrasó en los comicios por departamento y tendrá quórum propio en la Unicameral.
En una elección en la cual ningún actor se animaba a anticipar los resultados, el ex gobernador José Manuel De la Sota se impuso en los comicios a través de un amplio triunfo, con cerca de 42% de los sufragios, según las bocas de urna. De esa manera, iniciará en diciembre de este año su tercer mandato como gobernador y el cuarto consecutivo de Unión por Córdoba al frente del Ejecutivo, mientras que el candidato del Frente Cívico, Luis Juez -el segundo con cerca de 30% de los votos- acumulará su segunda derrota electoral consecutiva. El triunfo no sólo confirma la continuidad de las victorias oficialistas en las provincias en 2011 -sólo en una hubo cambio de gobierno- sino que también constituye un fuerte espaldarazo para las aspiraciones nacionales de De la Sota.
El justicialismo tuvo una muy buena cosecha de votos en Capital, revirtiendo la diferencia de 25 puntos que le había sacado el juecismo en 2007 -para lo cual fue clave la gestión de Schiaretti- y mantuvo su liderazgo en el interior provincial, donde en algunos lados recogió más de 50% de los votos.
La jornada electoral arrancó con un día esplendido -24 grados por la tarde-, casi primaveral, como para tonificar el humor de los cordobeses que se aprestaban a encarar unos nuevos comicios a gobernador, tras las traumáticas jornadas de 2007. Los votantes debían enfrentarse, además, por primera vez con un nuevo sistema de votación.
Las primeras novedades de la jornada surgieron a partir de demoras de hasta una hora en un buen número de mesas para comenzar los comicios, tanto por la ausencia de urnas, por la falta de los separadores necesarios o por la tardanza de autoridades de mesa, entre otras situaciones.
La Justicia transmitía tranquilidad en cada oportunidad que podía y los datos de participación de votantes lo corroboraban. “Los fiscales públicos electorales nos indican que ha habido muy buena aceptación por parte de la población”, indicaba Luis Rubio. Se confirmó más tarde una participación del orden de 73% al cierre de la jornada. Al final del día, los veedores de la Organización de Estados Americanos (OEA) también calificaron los comicios como “muy positivos” y reconocían que “la gente participó con mucho conocimiento”.
Los graves problemas surgieron luego, en el escrutinio, cuando se produjeron largas demoras en el cargado de los datos y, por ende, en la elaboración del resultado definitivo (ver pág. 13).
Algo más de calor
La jornada empezó a tomar temperatura minutos antes de las 18. Mientras las radios y los canales de televisión empezaban a consignar que había una amplia diferencia entre el primero y el segundo -sin mencionar nombres, pero con alusiones bastante obvias para identificar ganadores y perdedores-, el candidato del Frente Cívico (FC), Luis Juez, denunció “una operación” y “una maniobra” armada “con recursos del Estado” tendiente a brindar “información intencionada y distorsiva” antes del cierre de la votación.
El candidato del FC se llamó luego a silencio y sus referentes bajaron el tono. Pidieron “ser prudentes”, con base en la experiencia de Santa Fe, “cuando al principio parecía que ganaba Del Sel y luego ganó Bonfatti”, decía Juan Pablo Quinteros. Confiaban, además, en los resultados que le darían a su fuerza las más de 200 mesas testigos con que contaban. Mientras tanto, llegaban a su bunker, aunque con muy bajo perfil, los referentes nacionales del Frente Amplio Progresista (FAP) Hermes Binner, Norma Morandini y Claudio Lozano.
El justicialismo hizo su aparición por medio de dirigentes de primera línea. Desde el bunker de campaña -ubicado en avenida General Paz al 300-, Carlos Caserio auguraba un triunfo “por muy buen margen”. Viejos dirigentes del PJ , que aparecieron muy poco en la campaña, llegaban al bunker oficialista.
La voz de los candidatos
El escrutinio iba lento, apenas 5% de los votos tras más de cuatro horas de finalizados los comicios. Pero poco después de las 22,30 se rompió la larga espera. Luis Juez, tranquilo y mesurado, apareció antes sus seguidores y las cámaras y reconoció su derrota. “Cuando nos robaron dijimos que nos robaron, y cuando perdimos decimos que perdimos”, sintetizó, seco, el candidato del FC.
Reconoció: “(No tuvimos) la perfomance electoral que esperábamos. Ha habido un ganador y no fuimos nosotros”, dijo, sin nombrar nunca a De la Sota. Señaló, además, que el Frente Cívico será “un celoso custodio” de las políticas delasotistas. Dedicó un párrafo especial, más enojado, a los votantes radicales. “Les dijimos que ésta era la oportunidad de acabar con una forma de hacer política”, les recriminó. Reconoció el papel de Gatica – “ganó Jesús María y Colón”- y apenas mencionó a Binner y Morandini. “Hoy empieza otra marcha y nos vamos a preparar para que los votos que nos faltaron los tengamos en 2015”, cerró.
Poco después apareció Oscar Aguad, en su bunker, acompañado del candidato presidencial Ricardo Alfonsín, a quien agradeció su apoyo en la derrota. “No alcanzó, no importa, así es la gesta política”, dijo, al tiempo que anunció que “seguirá defendiendo desde el Congreso los intereses del pueblo de Córdoba”. Esperanzado, señaló que “a lo mejor Córdoba nos da la revancha” el próximo domingo, en las primarias para presidente.
De la Sota apareció en su bunker a las 23.20, acompañado de Schiaretti -“sin su gestión sería imposible esta noche”, dijo-, su compañera de fórmula y su mujer, además de la primera plana del justicialismo local. Sorprendió con un discurso leído, sin salirse del libreto, como lo hizo en toda la campaña. Agradeció a quienes lo acompañaron, pero una buena parte de su discurso tuvo como horizonte el escenario nacional, al cual aspira para 2015. “A la Nación le digo que cuente con Córdoba para trabajar, para unir y no para dividir, para la construcción de un federalismo en serio, para resolver problemas y no generarlos artificialmente, para mirar hacia el futuro y no el pasado, con memoria”, apuntó.
“Hace falta que pensemos en grande”, señaló, “más allá del peronismo, radicalismo, socialismo o kirchnerismo”. Para De la Sota, su “modelo” de crecimiento “se llama cordobesismo y nació aquí esta noche”, dijo. “Es el camino hacia una Argentina unida”, remató, sin esconder sus aspiraciones nacionales.
Lecturas
Los resultados de ayer dieron por tierra con algunos de los pronósticos que auguraban un escenario de “tres tercios” en la provincia, que se concebía dividida en tres porciones más o menos similares de votantes de De la Sota, Juez y Aguad. Pero De la Sota obtuvo una clara diferencia.
La clave estuvo en que el justicialismo mantuvo su ventaja en el interior con respecto a la elección de 2007 y recortó la diferencia de 25 puntos porcentuales que ese año le había sacado Luis Juez en Capital. La fuerte inversión en obras que realizó el gobierno de Juan Schiaretti en los últimos dos años -apalancado por el Gobierno nacional en varios casos- tuvo un impacto innegable en el resultado de Capital.
Más de 200 localidades eligieron intendentes
Junto a la elección para gobernador y vice de la provincia de Córdoba, más de 200 pueblos y ciudades del interior renovaron sus jefes de gobierno.
Especial trascendencia cobraron las localidades de más de 10 mil habitantes, tales como La Calera y Jesús María. En la primera de ellas, se manifestó la tendencia de más de 70% de las que ayer plegaron la elección de sus autoridades a los comicios provinciales, y en las se confirmaron los colores partidarios de quienes ya venían ejerciendo el poder. En el caso de La Calera, el oficialista Juan Domingo “Cacho” Echepare renovó su cargo hasta 2015.
Igual comportamiento se repitió en Calchín Oeste, Capilla de Sitón, Elena, La Carlota, La Cumbre, Leones, Morteros, Oliva, Oncativo, Unquillo, Tulumba, Villa del Rosario y Totoral.
En el otro extremo se ubicaron aquellas localidades que decidieron dar la nota y cambiar a sus jefes de gobierno. Fue el caso de Adelia María que eligió al candidato de la UCR para hacerse cargo de su intendencia, mientras que para legislador departamental ubicó al candidato de UPC, Hugo Cometto, justamente el intendente saliente. Otras localidades que cambiaron fueron Jesús María, Alcira Gigena, Jesús María, Laborde, entre otros.
Finalmente, en 34 de las 204 localidades que convocaron a elecciones municipales, los vecinos ya sabían por anticipado quién será el próximo intendente, ya que fueron inscriptas y proclamadas con listas únicas de candidatos. Fue el caso de Bulnes, Cabalango, Los Molinos, Villa Rumipal y San Esteban, entre otros.
Opinión
Alejandro Tejerina – Abogados
“En el día de hoy (por ayer) se expresó el pueblo y cuando el pueblo se expresa es bueno y dice lo correcto. Me parece muy bien, además, que se haya expresado casi 75% del padrón, lo que lo convierte en una muy buena elección más allá de quien haya resultado ganador”.
Ércole Felippa – UIC
“Creo que no debería haber sorpresas, porque si bien esta elección implica un cambio de gobierno, José Manuel de la Sota representa el mismo espacio político del actual gobernador, lo que resultaría en una especie de continuidad. Eso es lo que quedó en claro al menos a la hora de la exposición de las propuestas”.
Horacio Busso – Cám. de Comercio
“En primera instancia, me pareció impecable el desempeño de la boleta única. Fue muy fácil de usar”. En cuanto al triunfo de De la Sota: “Vamos a apoyar su gobierno como lo haríamos con cualquier otro. Nos pondremos en contacto con él durante la semana y seguiremos generando propuestas y proyectos”.
Emilio Etchegorry- Metalúrgicos
“Más allá del resultado de esta elección, mañana (por hoy) seremos nuevamente todos cordobeses y desde la cámara nos sumaremos para trabajar en el espacio que nos otorguen. Ésa es la política de la CIMCC. En cuanto al desempeño en la elección, lo analizaremos en la reunión de comisión”.