Por primera vez se realizó el Foro Hispanoamericano de Periodismo Científico en Argentina. Se debatió sobre turismo sustentable, las historias locales para retratar la crisis climática global y cómo obtener y utilizar los datos para comunicar
Córdoba fue sede de un evento inédito: el Foro Hispanoamericano de Periodismo Científico, que por primera vez tuvo una edición en Argentina. Este espacio, que busca fortalecer la comunicación científica, reunió a periodistas y comunicadores de diversas provincias en el Centro Cultural España Córdoba.
Organizado por la Red Argentina de Periodismo Científico (RadPC), el foro que tuvo lugar el pasado 21 de noviembre, abordó tres grandes temas: turismo sustentable, historias locales sobre crisis climática y el uso de datos científicos para comunicar. Desde 2017, el evento se celebra anualmente en Ciudad de México, promovido por la Red Mexicana de Periodistas de Ciencia (RedMPC). Este año, además de la edición argentina, se desarrollaron actividades paralelas en Chile y Perú.
El foro, que contó con la participación de 50 asistentes de diversas provincias en su jornada presencial y 88 personas de 15 países en su taller virtual, culminó con propuestas innovadoras para narrar los desafíos climáticos de la región, destacando la importancia de unir datos duros con historias que conecten con las comunidades locales.
Retos urgentes
La jornada inició con una charla a cargo de Mar Centenera, corresponsal en Argentina del diario El País de España. Reflexionó sobre el impacto ambiental del turismo, señalando cómo las emisiones de dióxido de carbono derivadas de los traslados y el turismo masivo contribuyen al cambio climático.
Asimismo, expuso cómo el calentamiento global afecta al sector: playas que desaparecen por el aumento del nivel del mar, olas de calor intensas y fenómenos extremos, como la reciente DANA en España. “Existe un turismo depredador que va destruyendo lugares. Playas abarrotadas de sombrillas, mares llenos de cruceros y ríos contaminados con plástico”, afirmó.
En la segunda mesa participaron Cecilia Fernández Castañón (directora de AmbienteNEA, Corrientes); Soledad Sgarella (editora de La Tinta, Córdoba) y Natalia Concina (editora de Confiar en Télam, Ciudad de Buenos Aires) contaron detalles sobre artículos que escribieron de problemáticas ambientales en el territorio.
Fernández Castañón describió la historia situada en Formosa, donde se forman “peladares”, ambientes naturales que quedaron sin vegetación. El artículo cuenta qué se está haciendo para recuperarlos y cómo impacta en la población local. “La idea era tener un enfoque de periodismo de soluciones y contar cuáles son los desafíos que se enfrentan”, indicó.
Sgarella se refirió a la experiencia de contar la historia del incendio de Chancaní ocurrido en 2024, el cual no tuvo la atención mediática de otras regiones de Córdoba. “Desde La Tinta pensamos que el derecho a la información es tener acceso a la información en su complejidad, que incluya las voces de los que muchas veces no tienen el espacio”, aseguró.
Finalmente, Concina relató su experiencia en Ingenierio Yacobacci (Río Negro). Ella acompañó a un grupo de científicos a esta localidad y habló con la comunidad sobre la problemática del acceso al agua. “Siempre nos preguntamos qué podemos hacer los periodistas, porque nos damos cuenta que no alcanza. Tenemos que contar historias porque hay textos que hacen daño. Por lo menos, tener la avidez de ir a un lugar, trascender nuestra mirada y mostrar la mirada del lugar”, señaló.
Combinación poderosa
El foro cerró con un conversatorio titulado “La fuerza de narrar con datos”.
Lucio Scardino presentó a Infraestructura de Datos Espaciales de la Provincia de Córdoba (Idecor), institución en la que trabaja como comunicador. Enumeró los diferentes productos vinculados al ambiente que elabora este organismo, como mapas de incendio y de vulnerabilidad, todos de libre acceso.
En tanto, Ezequiel Arrieta, investigador del Conicet y editor del sitio El Gato y la Caja, se refirió a las grietas que existen entre científicos y comunicadores. La primera es el uso del lenguaje, pero también aseguró que manejan tiempos e intereses diferentes. “Uno de los intereses de los investigadores debería ser compartir el conocimiento, pero hoy el sistema científico no premia eso”, dijo.
Florencia Ballarino, editora de ciencia de Chequeado y presidenta de la RAdPC, citó que en el país no hay datos en muchas áreas estratégicas o están desactualizados, pero también los organismos del Estado los ocultan. “Hay que saber qué hacer con los datos, contextualizarlos y ponerles un rostro humano para que generen interés en el público”, dijo.
Sobre este punto, Jorgelina Hiba, directora de medio DosAmbientes, de Santa Fe, agregó: “El dato enriquece un relato, pero una nota periodística que solo tiene datos se parece más a un artículo científico”.
El foro inició el martes 19 con un taller virtual sobre cambio climático y salud, organizado por la ONG Salud sin Daño. En este espacio se discutieron indicadores y metodologías para analizar cómo el cambio climático afecta la salud pública. Entre los panelistas destacaron expertos como Daniel Rodríguez (Salurbal), Yasna Palmeiro Silva (Lancet Countdown Latinoamérica) y Francisco Chesini (SIBSA).
Durante el evento se midió la huella de carbono y se acordó plantar árboles nativos en alianza con el Instituto de Transformación Energética de Córdoba (ITEC). La actividad contó con el respaldo de instituciones como la Cooperación Española, el Ministerio de Ambiente y Economía Circular de Córdoba y las universidades nacionales de Cuyo y Córdoba.
Negacionismo del cambio climático y desafíos
El foro incluyó reflexiones fundamentales sobre cómo abordar el negacionismo climático en un contexto de desinformación creciente. En diálogo con Comercio y Justicia, Florencia Ballarino, presidenta de la Red Argentina de Periodismo Científico (RAdPC), destacó que el negacionismo del cambio climático no implica únicamente rechazar la ciencia, sino que involucra múltiples sesgos y teorías conspirativas.
“Es importante entender que el cambio climático nos afecta a todos. Hay un pequeño grupo de personas que niega constantemente este fenómeno, pero tienen gran repercusión en redes sociales”, explicó. Sin embargo, subrayó que la mayoría de las personas reconoce la existencia del cambio climático y cree que es causado por el hombre. Para sustentar esta afirmación, mencionó una encuesta realizada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que refleja una conciencia global creciente sobre esta problemática.
Durante el foro, se discutieron estrategias para combatir la desinformación en un contexto de voces que apuntan a desjerarquizar la ciencia. Para Ballarino, un punto alentador es la percepción de los jóvenes frente al cambio climático. Considera que las nuevas generaciones tienen acceso a información sobre esta crisis y están más conscientes de su gravedad