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Escenario político actual
El gobierno anarco-capitalista de Milei eliminará todo lo que -según él- agranda el Estado e interfiere en el accionar del capitalismo, menoscabando y reprimiendo la movilización de las entidades intermedias. De esta forma Milei rompe con nuestra forma de pensar que concibe la complementación público-privado como un modelo de integración de esfuerzos, para mayor bienestar de los argentinos.
Con la destrucción del Estado y la represión a las movilizaciones del pueblo que defiende el trabajo, la producción, las ciencias y el avance tecnológico, Milei persigue constituirse en el Estado mismo, utilizando el RIGI de la ley “Bases” para negociar directamente con grandes corporaciones financieras y empresas que -beneficiadas con ciertas canonjías, disminución impositivas y fiscales y libertad absoluta . puedan fácilmente extraer y exportar los recursos estratégicos, como el litio, el petróleo, el gas, las commodities, etcétera.
Esta estrategia que, disimulada tras el objetivo de alcanzar el déficit cero, desmiembra el Estado nacional, despojándolo de responsabilidades en educación, salud, obras públicas, avance tecnológico, comunicación, etcétera, tirándoselas despectivamente a las provincias.
De esta forma, Milei, modificando las cifras del Presupuesto nacional, elimina los rubros que le impiden provincializar o privatizar dichas tareas, mientras frena toda posibilidad de participación de las entidades intermedias y del pueblo organizado, frustrando cualquier atisbo de resistencia a los planes mesiánicos y de entrega del país.
Para Milei, el problema social es una circunstancia menor atendible posteriormente a la realización del plan económico -“porque los pueblos son una máquina de exigir cosas”-, muchas de ellas exageradas entorpeciendo el crecimiento económico”. El desarrollo social, tranquilamente podría cubrirse con el derrame producido por la “economía”.
Además, el Presidente sostiene que el pueblo es incapaz de convertirse en factor esencial de una economía exitosa y absorbe muchos recursos de la gente de bien para su educación y preparación técnica gratuita. Realmente no le interesa el virtuosismo laboral y productivo argentino, ya que sus únicos héroes son los empresarios y capitalistas que bancan el avance tecnológico con posibilidades de propender a la eliminación del trabajo humano, por medio de la robotización, que es la forma deshumanizada de quitarle dignidad al hombre y a la mujer. Dicha actitud marca su total deshumanización.
Invertir en el pueblo lo considera un gasto aunque se procure su formación ética y moral porque -por lo contrario- lo que busca es una mayor degradación social, resintiendo la cultura del trabajo, las capacitaciones técnicas y científicas, y la solidaridad social como el amor a la Patria, para anularlos y así perder la voluntad de defender la libertad, independencia y soberanía nacional, cuando todo ello constituye parte de la grandeza de una Nación.
Continuidad del modelo de gobernanza
Los seis primeros meses de Milei, son clara muestra de sus mesiánicos propósitos, no comprendidos por los idiotas útiles, quienes según Milei, son los diputados, senadores y gobernadores que se entregan a sus propuestas, por el temor al fracaso de sus futuros planes personales, aceptando la subordinación a sus políticas libertarias.
Todo continuó peor de cómo venía antes, agravando aún más la situación social por lo que un cambio de gobierno no sólo no elimina las causas sino -como en este caso- las sigue profundizando maligna y sagazmente.
Dentro de este proceso, analicemos lo acontecido en el Congreso Nacional ante la falta total de ética y honestidad en uno de los cenáculos donde deberían operan los “auténticos representantes del pueblo” en tratamientos indecorosos sobre el futuro de la comunidad nacional que como “conejillo de indias” es sometida a políticas económicas y sociales aberrantes e impregnadas de pautas anarcoliberales que magnifican la degradación e involución social a millones de argentinos, con cierres de fuentes de trabajo, aumento exponencial de la desocupación y el empleo indigno.
La “oposición dialoguista”, que votó a favor de tales reformas, mezquina una clara explicación y todos sus integrantes repiten la muletilla de que “era necesario aprobarlas para que el Presidente pueda gobernar”.
Milei generó el mayor ajuste de la historia, con pobreza y regresión productiva y laboral pocas veces vista; cedió nuestra soberanía al imperialismo anglosajón, nos involucró en guerras ajenas y rupturas diplomáticas con muchos gobiernos latinoamericanos y potencias por él calificadas de comunistas. De esto a la“oposición dialoguista” poco y nada le interesa.
La ética y moral en la representación institucional
Es evidente la falta de ética y honestidad, por lo que es menester analizar objetivamente, porque la ausencia de ellas, no sólo en partidos sino también en distintas entidades intermedias, menoscaba su jerarquía representativa.
Los presidentes de cámaras, gremios, cooperativas, pymes, etcétera, deben ser fieles a sus mandatos y no obrar a favor de canonjías personales o negociando prebendas con partidos ni con los gobiernos de turno, pero respetando las relaciones institucionales en las que cada parte es fiel exponente de los derechos y obligaciones ya sea los de la entidad que representan, como el gobierno que representa al pueblo.
Valoro la complementación público-privado, que define y ejecuta políticas públicas que son significativamente sanas para el pueblo en su conjunto sin que medie ningún tipo de “arreglo encubierto” al margen de la relación puramente institucional, como también la de integrarse en organismos como los consejos económicos y sociales u ámbitos público-privado, similares.
Los candidatos a presidente, gobernador, congresales, intendentes, etcétera, lo son hasta el momento de la elección. Una vez elegidos como oficialistas u opositores se convierten en auténticos representantes del pueblo. Sin embargo, esto no sucede porque siguen primando las directivas de sus partidos, constituyendo una aberración político-institucional ya que sin ética ni moral dejan sin representación al pueblo que los votó.
Lo mismo sucede con los dirigentes de las entidades intermedias, quienes sustentan representaciones sectoriales y, por relación personal con un partido o coalición, afectan su idoneidad y autoridad gremial. Por eso tales organizaciones deben ser apartidarias.
La economía forma parte de la filosofía moral de un gobierno
La economía en una comunidad es indicativa del peso moral, según afecte su estándar de vida espiritual y material, para que se cumpla la sentencia de mente sana en cuerpo sano, contribuya a un mayor bienestar y pueda cultivar valores y virtudes por medio de la formación educativa, cultural y científica.
Una comunidad no es un montón de individualidades en el que cada uno hace lo que le plazca, porque sería una población sin historia, sin saber de costumbres y culturas ancestrales, como la de no poseer conciencia para ser libres e independientes en el territorio donde nacieron sus ancestros y donde podrían construir un futuro digno.
De allí que tanto las pautas económicas como las sociales y culturales asumidas por el pueblo fortalecen su unidad y pertenencia y las conmina a lograr el poder económico y desarrollo social de todos y cada uno de sus habitantes.
Sucesos aberrantes y antinacionales
El aberrante suceso en Corrientes, con la desaparición del niño Loan, pone en claro la trama armada entre criminales, traficantes, especuladores financieros y la falencia ética y de honestidad de políticos, fuerzas de seguridad, jueces y gobernantes, quienes -como principales actores de estas ignominias- vienen operando desde años en el país, gracias al criminal proceso de degradación social infligido -desde el poder- a los argentinos.
Por otra parte, el hecho antinacional se produce en la provincia de Tucumán con la parodia de firmar un “pacto de mayo”, el 9 de Julio, claramente anticonstitucional y en las antípodas de lo que se firmó en 1816 como Día de la Independencia Nacional. Hoy los argentinos vimos palmariamente como gobernadores de partidos políticos venales perdieron el basamento histórico y cultural que siempre marcó nuestro destino libre, independiente y soberano.
Unidad nacional
Nuestra debilidad se produce por divisiones y enfrentamientos que aviesamente nos introdujeron para que nos peleemos entre hermanos y nos puedan devorar los de afuera, ya que muchos gobernantes fueron imbuidos de pautas por el último golpe de 1976, para convertir a la democracia en una lucha permanente por el poder, llevándonos a una crisis ética y moral que nos acosa desde ese maldito poder de corrupción y políticas venales, combatiendo inútilmente los efectos de la crisis, mientras sus causas siguen horadando el bienestar y dignidad de los argentinos.
Por último, es criminal un gobierno que no entienda la verdadera génesis de la crisis nacional y se empecina en acomodar los números de un déficit sin tomar en cuenta que detrás de cada número hay un argentino,.
(*) Ex ministro de Obras Públicas de la Provincia de Córdoba
Coincido en el análisis político