Aparte de ser más barato, el incremento del GNC en el último año fue sólo de 15 por ciento, contra el 34 por ciento que anotaron las naftas que usan los coches de alto precio.
A un costo hasta cuatro veces menor que los combustibles líquidos, los autos del segmento premium empezaron a mudarse al gas natural comprimido. Según un informe de la Cámara Argentina de GNC (Cagnc), las conversiones crecieron más de 50% en 2010, luego de una baja en 2009.
La brecha entre el precio de las naftas y el del metro cúbico del gas se mantuvo amplia, a lo que se sumó una fuerte competencia entre las compañías. Esta disputa por el mercado motivó una presentación de expendedores independientes de Córdoba ante Defensa de la Competencia, por una presunta venta bajo el costo por parte de las grandes compañías. El valor en la ciudad de Córdoba del metro cúbico de gas se mantuvo por debajo de un peso.
La conversión de los motores demanda una mediana inversión que, sin embargo, se amortiza rápido en el caso de uso intensivo del automóvil.
El año pasado, con un total de 106.406 vehículos, la cantidad de equipamientos instalados se elevó 51,44% respecto de la marca alcanzada en 2009, según un cruce entre los registros del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) y datos de empresas privadas realizado por la Cagnc .
De esta forma, el promedio mensual de los cambios de nafta por gas, que había llegado a 5.855 en 2009, se ubicó el año pasado en 8.867 con un pico en julio, mes en que se registraron 10.673 conversiones, un número que casi duplicó el registrado en febrero de 2010, que había sido el piso.
Además, hubo otra particularidad relacionada con los vehículos convertidos. “Vemos una mayor participación de gamas de autos más sofisticadas debido a las mejoras tecnológicas en los equipos”, destacó Fausto Maranca, presidente de la Cagnc, quien auguró para este año una continuidad del éxito reflejado en las últimas cifras procesadas por la entidad.
Según proyecta Maranca, al atractivo de esta alternativa económica tendrá el impulso adicional de una innovación: la instalación de equipos de GNC en vehículos de carga que funcionen con diésel.
La cámara del GNC estima que en el país circulan alrededor de 1.600.000 vehículos con gas, abastecidos por unas 1.900 bocas de expendio. A diferencia de lo que ocurre con las estaciones que venden combustibles líquidos, en decadencia por la baja rentabilidad del negocio, el camino es el inverso para las expendedoras de GNC.
Conveniencia
La opción por el GNC se relaciona con el fuerte encarecimiento de las naftas, que desde enero hasta diciembre del año pasado treparon, en promedio, hasta 34% en los productos premium, y 23% en el caso de la súper normal.
* El relevamiento fue realizado por la Asociación de Dirigentes de Empresa (ADE).
* Además de ser más barato, el avance en los precios del gas fue de 15%, según el mismo informe.