El Gobierno reglamentó una nueva moratoria para que las distribuidoras de energía salden su deuda con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) en ocho años.
La decisión se activó tras la modificación que sufrió el artículo 89 del Presupuesto, que autorizaba aumentos a las eléctricas para que le paguen a Cammesa. A enero, la deuda total de las distribuidoras eléctricas del país alcanza los 680 mil millones de pesos.
Se trata de un esquema que replica el anterior de 2022, y apunta a que las distribuidoras regularicen su situación con la firma que administra el mercado mayorista.
Según la resolución 56/2023 publicada en el Boletín Oficial y firmada por la secretaria de Energía, Flavia Royón, se establece para los agentes distribuidores del Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) que al 31 de diciembre de 2022 no hubieran celebrado los acuerdos relativos al Régimen Especial de Regularización de Obligaciones y que a esa fecha mantengan obligaciones pendientes de pago con Cammesa y/o con el MEM, un plan de regularización de deudas en hasta 96 cuotas mensuales y consecutivas.
La primera vence el mes inmediato siguiente a la firma del Acta Acuerdo correspondiente.
Esta moratoria difiere de la anterior porque no hay una tasa de interés menor ni plazo de gracia (en la anterior versión había hasta seis meses de gracia y una tasa de interés equivalente de hasta 50% de la vigente en el MEM).
Cada cuota será abonada en pesos por el equivalente del valor de los megavatios hora (MWh), según el resultado que arroje la fórmula de monetización del plan.
En la moratoria anterior, concretada en el último trimestre de 2022, se firmaron convenios con 16 distribuidoras de todo el país, para regularizar una deuda de $211.000 millones.