El Gobierno porteño afirmó que no quiere perjudicar la prestación de servicios y la actividad comercial. Santa Fe anuló el día no labrable previo a la navidad para compensar el parate por el sorpresivo feriado del martes 20
El Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) anunció que no adherirá al asueto en la administración pública dictado por el Gobierno nacional vía decreto (820) para los días viernes 23 y 30 de diciembre, los últimos días laborales hábiles antes de las fiestas.
La Administración porteña informó que resolvió que la actividad en la capital del país desarrolle en forma habitual, como en un día hábil.
“Con la decisión se busca no alterar el funcionamiento de los servicios de la y la actividad comercial en consonancia con las festividades de Navidad y Año Nuevo”, dice el comunicado.
“El Estado debe fomentar políticas que mejoren la calidad de vida de los ciudadanos en lugar de regular, mediante disposiciones, la libertad y los derechos individuales”, concluye.
Por su parte, Santa Fe canceló el asueto del 23. Se había adherido pero lo anuló como forma de recuperar el parate de actividades que ocasionó el sorpresivo feriado del martes 20, dispuesto por el Gobierno nacional tras la victoria de la Selección Nacional en la final de la Copa Mundial de Qatar 2022.
El DNU que Alberto Fernández dictó el lunes 19 generó descontento en el sector empresarial y en varios gobiernos provinciales -tanto oficialistas como opositores- y algunos, como Catamarca, Mendoza y San Juan, decidieron mantener el giro habitual de la administración pública. Lo propio hicieron municipios de todo el país.
La oposición también fustigó la medida. El lunes 19, mientras el feriado era solo títular de páginas de diarios porque el DNU de rigor no estaba disponible debido a que la página web del Boletín Oficial de la Nación no funcionaba, varios referentes manifestaron su desacuerdo en las redes sociales.
En su cuenta de Twitter, el titular del interbloque de JxC en el Senado, el mendocino Alfredo Cornejo, estimó que es innecesario “someter a todo el país” con un feriado nacional y “paralizar la producción y la educación” por un festejo que se realizará en suelo porteño.
La titular de PRO, Patricia Bullrich, también se quejó. “¡Bienvenidos, Campeones del Mundo! Recibamos a Messi y a la Selección con los valores que compartimos con ellos: los del esfuerzo y el trabajo. #YoFestejoTrabajando”.
Por su parte, el diputado radical Pedro Galimberti (Ente Ríos) sostuvo: “El trabajo y el esfuerzo se homenajean con más esfuerzo y más trabajo. Basta de demagogia populista”.
Por su parte, el diputado de la CC-ARI Rubén Manzi planteó: “Lunes, asueto administrativo; martes, feriado nacional; viernes, asueto…. ¿No se les está yendo la mano? La Argentina necesita trabajar para salir adelante”.
En tanto, la diputada nacional porteña Sabrina Ajmechet (PRO) disparó: “El gobierno nos somete constantemente a vivir en una locura. No sabemos si mañana es feriado o no. Circula un decreto que es fake y los ciudadanos no sabemos cómo organizar nuestro día de mañana. Este nivel de improvisación y de maltrato no se soporta, arruinan hasta lo más feliz”.
Cabe recordar que el juez del Tribunal Fiscal de la Nación (TFN) Juan Manuel Soria Acuña declaró nulo de nulidad absoluta e insanable el DNU que dispuso que el martes 20 de diciembre fuera feriado nacional.
Soria Acuña afirmó que Fernández se arrogó facultades Legislativas y que violentó la división de poderes con una actitud “dictatorial.
“El retorno al país de la selección de ningún modo puede caer dentro de las ‘circunstancias excepcionales’ tenidas en mira por la Ley Fundamental para autorizar al Poder Ejecutivo a asumir facultades que son exclusivas del Congreso, trastocando el principio de separación de poderes”, enfatizó el vocal del TFN, un organismo autárquico que se especializa en materia tributaria y aduanera que recibe las apelaciones que los contribuyentes contra resoluciones del Fisco y cuyos fallos pueden ser revisadas por la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal.
Además, recordó que el Legislativo está sesionando en período ordinario, conforme la prórroga dispuesta por el decreto 761/22.
Soria Acuña también señaló que las circunstancias excepcionales que “puedan pasar por la mente del presidente” y de sus ministros -quienes, en sus palabras, se “prestaron” a firmar el DNU- “no pueden prevalecer, anulándolas dictatorialmente, sobre las circunstancias ordinarias de las actividades que el 20 de diciembre de 2022 tenían previsto celebrar millones de argentinos en toda la geografía nacional, pueblo soberano cuya única representación constitucional la ejerce el Congreso”.
En esa linea, resaltó que aquellas actividades constituyen el ejercicio de derechos constitucionales fundamentales que no pueden ser suspendidos ni suprimidos intempestivamente por actos unilaterales del presidente y sus ministros.
“Los ciudadanos y habitantes de la República no tienen que soportar ninguna clase de daños, perjuicios o alteración mínima en su esfera personal, familiar o patrimonial como consecuencia de tales actos nulos”, acotó.
La decisión de Soria Acuña tuvo efectos sobre la labor de su propia vocalía en el TFN -que trabajó durante la jornada- y fijó una posición jurídica sobre la sorpresiva y confusa medida que motorizó el Gobierno nacional.
No obstante, declaró inhábil a los efectos procesales el 20 de diciembre, sin perjuicio de los actos cumplidos.