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Capuchetti quiere saber si ambas fuerzas delinquieron al manipular el teléfono de Fernando Sabag Montiel. Se basó en un informe de Gendarmería
La jueza María Eugenia Capuchetti, quien junto al fiscal Carlos Rívolode dirige la pesquisa por el ataque a la vicepresidenta, denunció a la Policía Federal Argentina (PFA) y a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) para que se esclarezca delinquieron cuando manipularon el teléfono de Fernando Sabag Montiel horas después del intento de homicidio.
Capuchetti procedió luego de analizar un informe de Gendarmería Nacional que, a través de un peritaje, estableció que en la madrugada del 2 de septiembre pasado un experto de la PFA bloqueó el teléfono al intentar extraer la información.
El documento añade que el celular quedó reseteado cuando ya estaba en poder de la PSA.
La funcionaria afirmó que ante los resultados del peritaje correspondía denunciar a las dos fuerzas involucradas, a los fines de establecer si se cometió un delito de acción pública.
Por sorteo, la causa quedó en manos de la jueza María Servini.
Inicialmente, el equipo fue manipulado por un agente de la PFA.
Según el acta que labró la PSA, el teléfono le llegó a las 23 del 2 de septiembre, ya reseteado. Parte del material se pudo recuperar, pero aún se está intentado hallar la totalidad.
Si bien no hay un protocolo específico que dictamine los lineamientos particulares a seguir sobre dispositivos bloqueados, Gendarmería planteó que personal de la PFA debió advertir a la jueza sobre “la necesidad de utilizar herramientas especializadas en desbloqueo e inmediatamente preservar el dispositivo conforme a las buenas prácticas de la informática forense”.
La Gendarmería detectó falencias en la labor de la PFA y de la PSA. “El equipo presentaba configuraciones avanzadas de un usuario con conocimiento, lo que hace que el equipo sea vulnerable y/o sensible ante la manipulación propiamente dicha. En las actividades del ‘history’, el equipo presentó un error de integridad, lo que causó un ‘wipe data’, o lo que se conoce como un borrado seguro”, reseñó.
En la causa están detenidos Sabag Montiel y su novia Brenda Uliarte, considerados coautores de intento de homicidio agravado; y Nicolás Gabriel Carrizo, el jefe de los “copitos”, señalado un partícipe secundario. Cristina Fernández de Kirchner pidió agravar las acusaciones a una asociación ilícita e incluir a más sospechosos.
Recientemente, la Cámara Federal rechazó la recusación de la vicepresidenta contra la magistrada y dio instrucciones para avanzar con medidas de pruebas vinculadas a la pista que involucra al diputado del PRO Gerardo Milman.
