La enfermera Brenda Agüero será sometida a una nueva indagatoria este lunes en los tribunales de Córdoba, consecuencia de la ampliación de la imputación que decidió el fiscal Raúl Garzón en simultáneo con la confirmación de su prisión preventiva. Así, Agüero pasó de la acusación original por dos hechos de homicidio calificado por uso de vía insidiosa, a cinco, y a otros ocho, en grado de tentativa.
La enfermera fue detenida el 19 de agosto pasado, en principio acusada de dos muertes, las de las bebas Angeline Rojas y Melody Molina, quienes nacieron sanas el 6 de junio en el Hospital Materno Neonatal de la Provincia pero murieron de manera inexplicable antes de cumplir el primer día de vida.
La ampliación de imputación determinada por Garzón fue fundada en los informes forenses. Los resultados de la autopsia concluyeron que dos recién nacidos fallecieron como consecuencia de “exceso de potasio“.
Según consignó el informe, la autopsia detalló que tal exceso fue “inyectado de manera intencional” y que “se detectaron sustancias tóxicas incompatibles con la vida”.
Paralelamente, entre las evidencias la fiscalía encontró búsquedas que Brenda Aguero hizo en Internet sobre cómo dosificar potasio y cómo dosificar insulina en bebés.
Agüero habría accedido a documentación técnica que puede dar sustento a lo que pasó después en el Neonatal, y así confirmar que habría pensado y diseñado un mecanismo para causar la muerte y que luego, con base en el estudio de los casos, habría aplicado y hasta probado con diferentes variantes.
Cabe recordar que la enfermera declaró en septiembre durante más de dos horas, durante las cuales negó todos los hechos.