Por las frutas y verduras, en agosto pasado el consumidor pagó 5,9 veces más de lo que cobró el productor, según los resultados del Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) que elabora el sector Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
De esta manera, el público abonó cerca de $6 por cada peso que recibió el productor frutihortícola.
En el caso de la canasta ganadera, el comportamiento de los precios en los cinco productos y subproductos que la integran resultó, en promedio, el siguiente: los precios de leche, huevos, pollo y carne de novillo y de cerdo se multiplicaron por 2,8 veces desde que salieron del campo (origen) hasta que llegaron a la góndola (destino).
Además, al considerar el IPOD general, “por los 24 agroalimentos de la canasta IPOD, 19 de origen frutihortícola y 5 ganaderos, el consumidor pagó 3,6 veces más de lo que cobró el productor, por segundo mes consecutivo”, señaló CAME.
Al respecto, los cinco agroalimentos que registraron en el mes una mayor brecha entre origen y destino resultaron ser el limón (+17,1), el zapallito (+15,7), la zanahoria (+10,6), la manzana roja (+9,3) y la naranja (+7,4).
De acuerdo con el reporte de la entidad, los productores de los agroalimentos con mayores brechas entre campo y góndola coincidieron en “la falta de precios de referencia, provocada por la inestabilidad de la macroeconomía y su impacto en el precio de los principales insumos que utiliza la producción agropecuaria”.
Asimismo, en el caso de los cítricos, la brecha fue adjudicada a “las alteraciones ocasionadas por la guerra en Ucrania”.
En esa línea, precisaron que “los productores explicaron la diferencia de precios origen-destino por la sobreproducción que fue volcada al mercado interno”.