A través de un comunicado, el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires expresó su “más absoluto rechazo” al proyecto de ley de Frente de Todos para aumentar la cantidad de miembros de la Corte Suprema de cinco a 25 miembros que tiene el aval del presidente y de la vicepresidenta.
En el documento, definió como “insólita” la pretensión de establecer una “Corte Federal” y aseguró que el objetivo de la propuesta es “subordinar completamente” al máximo tribunal al poder político.
“Esta iniciativa no es sino la reedición de maniobras que se han ensayado muchas veces en el pasado. No es aventurado afirmar que la historia de la decadencia argentina va de la mano de la historia de la manipulación de su Poder Judicial”, señaló la institución que conduce Alberto Garay.
“La Corte Suprema ya es federal. Como único Tribunal creado por la Constitución Nacional, es la cabeza del Poder Judicial Federal y sólo puede intervenir en cuestiones de interpretación de la Constitución o de las leyes federales”, enfatizó.
Paralelamente, recordó que los integrantes de la Corte son designados por el presidente de la Nación y deben contar con acuerdo de la Cámara Alta, que reúne a los representantes de las provincias.
Bajo esa premisa, juzgó que el actual gobierno pretende instaurar “un Senado paralelo de carácter jurisdiccional”.
El Colegio de Abogados porteño denunció también que el proyecto “desconoce de manera palmaria la naturaleza del Poder Judicial en general y de la Corte Suprema en particular”, que no es un órgano representativo ni corporativo. “Parecería que cada ministro del tribunal fuera a representar a una provincia. Es fácil inferir, entonces, que no se espera de ellos que apliquen la Constitución y las leyes a los casos en los que deban intervenir, sino que sus fallos reflejen los intereses de sus mandantes”, disparó la entidad.
“Paradójicamente, una Corte ‘federal’ perdería la atribución de asegurar la supremacía federal”, añadió el colegio en el documento que difundió.