El fiscal ante la Cámara de Casación Mario Villar reclamó anular el sobreseimiento de Cristina Kirchner y de sus hijos Máximo y Florencia en la causa Hotesur y Los Sauces. Asimismo solicitó que se realice el juicio oral y público, que abarca además a los empresarios Lázaro Báez y Cristóbal López.
La vicepresidenta, sus hijos y los empresarios habían sido investigados por presunto lavado de dinero. El fiscal manifestó que el único norte que tenían los jueces Daniel Obligado y Adrian Grumberg al sobreseer a Cristina Kirchner era cerrar la causa.
Villar asimismo presentó sus argumentos ante los jueces de la Sala I de la Cámara de Casación, que deben resolver en este caso. Se trata de los jueces Diego Barroetaveña, Daniel Petrone y Ana María Figueroa.
El fiscal señaló que el sobreseimiento de Cristina Kirchner “pone en evidencia que se trata de un producto de la exclusiva voluntad de los jueces o en un mero capricho del juzgador, es decir, no constituye una derivación razonada del derecho vigente”.
Desde su perspectiva Villar consideró que la sentencia es arbitraria y dedicó una decena de páginas a explicar las razones de esa arbitrariedad. Además, precisó que la apelación del fallo “reviste gravedad institucional”, ya que “excede el mero interés de las partes y se proyecta sobre el interés de toda la comunidad”, pues involucra incumplimiento de pactos internacionales contra la corrupción y el lavado de dinero.
“La afectación al principio de división de poderes que deriva de que un tribunal resuelva este caso con base en su sola voluntad, sin acudir al derecho vigente, constituye otro supuesto de suma gravedad institucional”, abundó Villar.