La familia de Úrsula Bahillo, la joven de 18 años asesinada en Rojas (Buenos Aires) por su ex pareja, un policía bonaerense que ya fue condenado a prisión perpetua, reclama la destitución de dos jueces que desestimaron las acusaciones previas contra el agresor por violencia de género.
A un año del femicidio, Patricia Nasutti, la mamá de la adolescente, sostuvo que a su hija la mató “un sistema que comprende al juez Marcelo Romero” y que si “no hubiese pensado en sus vacaciones” y, en cambio, hubiera “tomado una medida inmediata de detención”, Úrsula estaría viva.
La mujer también fustigó al magistrado de Paz de Rojas, Luciano Callegari. “Si hubiese escuchado las denuncias que le hice al ex novio de mi hija, que rompía las perimetrales, hoy sería otro tema”, enfatizó.
Al conmemorarse el primer aniversario del homicidio, familiares y allegados a Bahillo participaron de una concentración en la plaza principal de Rojas y de una misa en su memoria.
Nasutti expresó que si bien el autor del crimen de su hija, el policía comunal Matías Martínez, de 26 años, ya fue condenado, ahora espera que se actúe con los jueces que no hicieron lugar a las advertencias previas.
El reclamo de la madre de la víctima se centra en Romero, subrogante del Juzgado 1 del Departamento Judicial de Mercedes.
Sobre Callegari pesa actualmente un pedido de juicio político impulsado por la Defensoría del Pueblo bonaerense, junto a los organismos que forman parte del Consejo para la Prevención de las Violencias (Copreviol), por considerar que mostró negligencia e incumplimiento de sus deberes en relación a las denuncias contra quien terminó siendo el femicida de Bahillo.
Actualmente, la madre de la joven impulsa una petición mediante la organización Change.org (http://change.org/JusticiaPorUrsula) para que se adopten medidas tendientes a evitar que casos como el de su hija se repitan.
El 22 de febrero del año pasado, a tres semanas de asesinar a Bahillo, Martínez fue condenado a cuatro años de prisión por los delitos de lesiones leves agravadas en concurso con amenazas agravadas en el marco de la causa iniciada por una ex pareja.
En diciembre último, en tanto, fue sentenciado a perpetua por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Junín, por el homicidio doblemente agravado por el vínculo, por alevosía y por femicidio de Úrsula. Está alojado en la Unidad 49 de la Alcaldía Penitenciaria Junín y tiene una causa pendiente por el abuso sexual de una menor con discapacidad, hija de una ex pareja, con quien convivía en la localidad bonaerense de 9 de Julio.
“Fui una bendecida por tener un juicio oral mucho antes que otros casos. Hay víctimas que están esperando la sentencia hace más tiempo. A pesar de la condena no me va a cerrar nunca en mi vida esta herida, es una cruz que voy a llevar siempre”, sostuvo la madre de Bahillo, quien era única hija.