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La tendencia a romper el monocultivo responde a las lluvias y a la necesidad de preservar la productividad del suelo. Además, el precio del maíz se posiciona en un contexto internacional favorable
El maíz está ganando terreno frente a la soja, que va en retroceso. Según informó el Ministerio de Agricultura de la Nación, para la campaña 2010/2011 la siembra de maíz ganó 4 millones de hectáreas, cuya campaña llegará a 26 millones de toneladas de cereal.
En tanto, la siembra de soja perdió hasta el momento 2 por ciento en el área estimada para la siembra.
El maíz constituye un cereal fundamental para el desarrollo de otras actividades agrícolas, como la ganadería y la lechería, cuyas producciones se destinan al consumo interno. Los especialistas indican que al menos 10 por ciento de la siembra total de maíz se destinó al comercio en 2009, mientras que más de un millón de hectáreas se dedicaron a proveer a silos y tambos.
La soja, por su parte, es principalmente exportada para alimentar la cría de animales. China e India se erigen como los principales compradores. Según un informe de la revista especializada en energía Oil World, se espera que Argentina exporte 80 mil toneladas de aceite de soja a China en noviembre y 100 mil toneladas en diciembre.
Pese a registrarse esta notable rotación de cultivos, en la Bolsa de Cereales de Córdoba indicaron que se trata de un “reacomodamiento”. “No hay cambio de tendencia”, agregó en ese sentido Juan Carlos Martínez, presidente de la Bolsa de Cereales local y agregó que “no se toma como una realidad definitiva” el hecho de que los productores hayan optado por el maíz y evaluó que esto depende del contexto internacional, hoy favorable a la producción de este cereal.
“Los precios del maíz son más alentadores desde el punto de vista económico y esto invita a emprender una rotación demorada”, dijo Martínez.
Los motivos de la rotación
Según los especialistas, la tendencia a reemplazar el cultivo de soja por el de maíz puede explicarse por diversos factores, entre los cuales se destacan las lluvias demoradas del año pasado, la mejora registrada en la actividad ganadera, la siembra temprana de maíz y un contexto de precios internacionales alentadores.
“Todos los indicadores de oferta y demanda del mercado están hoy a favor del maíz, lo que ofrece una excelente oportunidad en Argentina para su siembra”, afirmó Pablo Ogallar, director de Marketing y Estrategia de Monsanto Latinoamérica Sur, citado en una nota publicada por este matutino el 30 de septiembre pasado.
El presidente de la Bolsa de Cereales de Córdoba reconoció este escenario mundial favorable y al mismo tiempo descartó que la producción de biodiésel por parte de Estados Unidos esté orientando la planificación de siembra de los productores agrícolas locales.
Consultado sobre los factores climáticos y ambientales que inciden en la siembra, el economista Jorge Ingaramo indicó que en el período anterior la siembra de soja era superior a la de maíz en una relación de 6 a 1, lo cual agotó los suelos. En ese sentido, en coincidencia con la opinión de Martínez, Ingaramo planteó que las rotaciones se presentaron como una “necesidad” del productor para garantizar la conservación de nutrientes en la tierra.
Por otro lado, el economista consultado por este medio señaló que se sembró temprano el maíz para evitar los efectos del fenómeno climático conocido como “La niña”, es decir, la época de sequía. De hecho, indicó que hoy se encuentra sembrada más de la mitad del área para siembra.
Ingaramo destacó el crecimiento de la actividad ganadera como factor que impulsa la mejora de los precios del maíz.
Ventajas para el maíz
– El precio del maíz ya se incrementó 30% desde abril en el mercado internacional. Su consumo mundialaumentó 50 millones de toneladas en apenas dos años.
– Las lluvias registradas durante este año garantizan las condiciones para una buena cosecha de cereales, como el maíz.
– Su cultivo facilita la conservación del suelo; favorece la generación de nutrientes.
