Con una extensa carta publicada en sitio web, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner se refirió a la crisis que atraviesa el gobierno que integra.
“El domingo 12 de septiembre el peronismo sufrió una derrota electoral en elecciones legislativas sin precedentes. Mientras escribo estas líneas tengo el televisor encendido pero muteado y leo un graph: ‘Alberto jaqueado por Cristina’. No… no soy yo. Por más que intenten ocultarlo, es el resultado de la elección y la realidad”, expuso la segunda de Fernández.
“No voy a seguir tolerando las operaciones de prensa que desde el propio entorno presidencial a través de su vocero se hacen sobre mí y sobre nuestro espacio político”, añadió.
“Alberto Fernández quería que Eduardo De Pedro fuera su Jefe de Gabinete y fui yo la que no estuvo de acuerdo. Mal podría ahora promoverlo para ese cargo”, acotó.
En otro tramo de su misiva, la ex presidenta y senadora manifestó: “En la provincia de Buenos Aires, termómetro inexcusable de la temperatura social y económica de nuestro país, el domingo pasado nos abandonaron 440.172 votos”.
“¿En serio creen que no es necesario, después de semejante derrota, presentar públicamente las renuncias y que se sepa la actitud de los funcionarios y funcionarias de facilitarle al presidente la reorganización de su gobierno?”, completó.
Además, aseguró que el martes se reunió con Fernández y que lo criticó por no llamarla antes. “El martes 14 tuvo lugar, otra vez en Olivos, mi última reunión con el presidente de la Nación. Habían transcurrido 48 horas sin que se comunicara conmigo y me pareció prudente llamarlo y decirle que tenía que hablar con él. Dejé pasar 48 horas deliberadamente, para ver si llamaba (debo decir que de las 19 reuniones, la mayoría fueron a iniciativa mía)”, escribió, y dijo que le manifestó que era necesario “relanzar su Gobierno”.
“Le propuse nombres, como el del gobernador Juan Manzur para la Jefatura de Gabinete”, afirmó.
Luego, apuntó contra Juan Pablo Biondi, el vocero presidencial. “A propósito de la categoría de funcionarios que no funcionan… el vocero presidencial escaparía a aquella clasificación. Es un raro caso: un vocero presidencial al que nadie le conoce la voz. ¿O tiene alguna otra función que desconocemos? ¿La de hacer operaciones en off por ejemplo? Verdadero misterio”, espetó.
Con esas palabras, Fernández de Kirchner confirmó lo que sus voceros hicieron trascender ayer: que ella no estaba pidiendo la renuncia de Martín Guzmán.
“Las operaciones son permanentes y, finalmente, sólo terminan desgastando al gobierno. Es increíble que no lo adviertan. Es una pena tanto daño autoinfligido”, acotó.
“Cuando tomé la decisión, y lo hago en la primera persona del singular porque fue realmente así, de proponer a Alberto Fernández como candidato a presidente de todos los argentinos y las argentinas, lo hice con la convicción de que era lo mejor para mi patria. Sólo le pido al presidente que honre aquella decisión… pero por sobre todas las cosas, tomando sus palabras y convicciones también, lo que es más importante que nada: que honre la voluntad del pueblo argentino”, finalizó.