ESCUCHAREn la Cámara 2ª del Crimen de la ciudad de Córdoba comenzó ayer la primera audiencia del juicio que se sigue contra el reconocido golfista cordobés Ángel “Pato” Cabrera, acusado de violencia de género.
Tal como estaba previsto, Cabrera -ganador del US Open 2007 y del Masters de Augusta en 2009- asistió de modo presencial a la audiencia y hasta hizo un descargo sobre las acusaciones de “lesiones leves calificadas y amenazas” y “lesiones leves calificadas y hurto” que pesan en su contra.
Contundente, Cabrera reiteró que es inocente y negó haber golpeado o haber ejercido cualquier tipo de violencia contra su ex pareja, la policía Cecilia Torres Mana. No obstante, admitió que la insultó y que tiró su celular, aunque sin apuntar al cuerpo de la mujer.
Cabe recordar que Torres Mana, quien estuvo en pareja con el golfista durante tres años, en sus declaraciones testimoniales de 2016 relató que éste la atacó a golpes de puño y que incluso intentó atropellarla con una camioneta. Luego, lo denunció de continuar amenazándola, a pesar de que el juez había impuesto una prohibición de contacto. En la última de las denuncias, Torres presentó un video a la Justicia en el que se ve a Cabrera acostado, en una videollamada, y le dice a su ex pareja: “Yo voy a salir; pero vos del cementerio, no”.
Las declaraciones de Cabrera ocurrieron luego de que la jueza Mónica Traballini rechazó el pedido del abogado defensor, Carlos Hairabedian, de suspender el juicio argumentando que se debía unificar con otras causas.
El letrado pidió además que se ordenara “su inmediata libertad”, y a su vez indicó: “Como en todo juicio, y el de Cabrera no puede ser la excepción, mi regla de conducta es la de subordinarme estrictamente a las pruebas que se reúnen en el proceso. Ellas me permitirán tener una opinión definida sobre determinados aspectos que hacen a la situación de mi defendido. Todos tenemos que someternos a ese criterio y actuar con prudencia, sin dejarnos vencer por los prejuicios que emponzoñan el debate”.
Se espera una veintena de testigos, quienes expondrán en las audiencias durante la jornada de hoy, el lunes y el miércoles próximos.
Cabe destacar que el inicio de este juicio estaba previsto para el año pasado; pero el día en que las partes debían notificarse, Cabrera voló en un avión privado a Chicago y quedó prófugo. El golfista permaneció varios meses en Estados Unidos y, cuando se le venció la visa temporal, vino a Brasil en un vuelo de línea, el 31 de diciembre pasado. A pesar de que Interpol había emitido una alerta rojo con su fotografía, logró pasar todos los controles e ingresar a Río de Janeiro, donde, se escondió durante 14 días el barrio de Leblon, hasta que finalmente fue detenido y enviado a la cárcel federal Plácido de Sá Carvalho.
Una vez que se realizaron todos los trámites burocráticos correspondientes a la extradición, fue traído a Córdoba y alojado en la cárcel de Bouwer.
